Martín Bianchi: "¿El CIS puede hacer encuestas flash sobre Pedro Sánchez, pero no sobre la monarquía?"

Madrid

En esta semana la actualidad política se lo ha puesto muy difícil a la información del corazón. Ha habido más sentimentalismo, enamoramiento y emotividad en la primera página de los periódicos que en las secciones de Gente. Martín Bianchi, por supuesto, lo ha denunciado nada más empezar sus 15 minutos de fama en el Hoy por Hoy: "¡Nos están robando nuestros espacios!". La alarma se hacía aún más intensa al detectarse en el estudio un claro aroma a "Eau de Sánchez", que pocas horas antes se había sentado en la misma silla y ante el mismo micrófono que él.

El primer titular que han comentado Àngels y Martín estaba oculto en las páginas de sociedad de un conocido diario madrileño, pero era evidentemente político. Se trataba de un entrecomillado de Luis Alfonso de Borbón y Dampierre, hijo de Carmen Martínez-Bordiú y del difunto duque de Cádiz: "La obra de mi bisabuelo Franco sigue ahí, sus logros nos siguen beneficiando" (a él sobre todo, como ha apuntado Ángels). En la entrevista desgranaba el argumentario franquista habitual (seguridad social, pantanos... "le faltó decir que gracias a Franco tenemos el menú del día") y mostraba, según Martín, "unos testículos más grandes que la fortuna familiar."

Y eso que dicha fortuna es literalmente incalculable (o más bien incalculada), porque no para de crecer. Recientemente la familia ha vendido la casa familiar en la calle Hermanos Bécquer, donde se crió Luis Alfonso con su abuela Carmen. Cuando decimos "casa familiar" no nos referimos al amplio piso en el que vivió la anciana después de abandonar El Pardo, sino al edificio entero, que ha sido reformado en su totalidad y vendido, piso a piso, por más de 70 millones de euros, que pasarán a engrosar las arcas de la familia del dictador.

Otra familia en la que no parece hacer mella el peso de la historia es la Ruiz-Mateos. Un nieto del fundador de RUMASA se ha casado por todo lo alto en Plasencia, mientras seis de sus tíos cumplen condena. Martín ha desvelado cuál es su miembro favorito del clan Ruiz-Mateos: Paloma, apodada "la sexóloga del OPUS Dei". "Es la Elena Ochoa de ellos. No es incompatible el sexo y el Opus. Ella estudió teología y pastoral de matrimonio, y da cursos. Uno de ellos se titula 'El sexo en el matrimonio, ¿une o desune?'"

Àngels y Martín han comentado también las malas noticias que reciben estos días los monarcas de Países Bajos. No solo inquietan las novedades sobre la Moccro Mafia que comentábamos la semana pasada, sino los datos preocupantes que reflejan las encuestas sobre el apoyo popular que reciben. Ahora mismo es del 53%, que no está mal. Pero en 2013, hace poco más de 10 años, en la abdicación de la reina Beatriz, era del 75%. El descalabro comenzó con un escándalo: cuando la familia hizo un viaje de placer a una mansión que tienen en Grecia dos días después de que se decretase el confinamiento por la pandemia de COVID. No han remontado desde entonces, a pesar de que Máxima sonría ("dientes, dientes") más que Isabel Pantoja en horas bajas. "Ella se desencaja la mandíbula para darnos tranquilidad," asegura Martín. Como las azafatas, está adiestrada para sonreír aunque todo vaya mal, y cuanto más sonríe posiblemente peor vayan las cosas.

En este punto Martín ha hecho un quiebro. Porque, si en Países Bajos se hacen encuestas sobre la popularidad de la monarquía, ¿qué impide que se hagan aquí también? "¿El CIS puede hacer encuestas flash, de un día para otro, sobre Pedro Sánchez, y no sobre la monarquía?" Aquí no hay encuestas sobre los reyes desde 2015, pero vemos que en otros países sí se hacen, aunque no las hagan los organismos del estado sino los medios de comunicación. Aquí, ni siquiera los medios de comunicación, "cosa que podría llevarnos a una reflexión", ha sugerido Martín.