Carlos Alcaraz ha caído derrotado ante Andrey Rublev en los cuartos de final del Mutua Madrid Open por 4-6, 6-3 y 6-2, dejando así el torneo sin ningún tenista español en el cuadro individual. Tras haber superado sus dolencias en el antebrazo al vencer tres partidos, el murciano ha explicado en rueda de prensa que se encuentra frustrado por no haber podido aprovechar las oportunidades que ha tenido durante el encuentro: «Ha sido un día difícil para mí después del partido de ayer, llevaba tiempo sin un partido así y me he levantado con agujetas en todo el cuerpo. El antebrazo estaba ahí, ahí, y eso me ha pasado factura». Sin embargo, no ha querido quitarle mérito al partido que ha hecho su rival, Andrey Ryblev, de quien ha asegurado que le ha dado «muy pocas oportunidades». Ha reconocido que mentalmente se ha encontrado «más débil» que en otros momentos: «He estado más quejica, me duele mucho tener opciones y no aprovecharlas». Para él, la semana ha sido «muy positiva», más aún, cuando «un día antes de empezar el torneo no sabía si iba a poder jugar». Ha asegurado que hubiera firmado esta participación en el Mutua Madrid Open: «Ahora, a seguir trabajando para ver si puedo recuperar mi derecha normal y sin pensar en el antebrazo. A ver cómo sigue en las próximas semanas». Alcaraz, antes de finalizar la rueda de prensa, ha dejado en el aire su participación en el Masters 1000 de Roma, a donde irá «con una protección extra» en su antebrazo: «En Roma seguiré jugando con ella por precaución, yo también espero con cariño a Djokovic. Veremos estos días, el pensamiento es ir a Roma con las mejores sensaciones posibles». Ha asegurado que, ante Rublev, ha pensado más en su antebrazo que en otros días. Más aún viendo que en su partido de octavos superó las tres horas: «Voy a ir a Roma, voy a trabajar para acercarme al 100% y decidiré estos días. Creo que estaré bien para jugar en Roma».