El Primero de Mayo por el mundo: amplios despliegues policiales y lemas de apoyo a Palestina

La fiesta del Primero de Mayo es escenario de reivindicación de los trabajadores y trabajadoras de todo el mundo, y este año llega además en un contexto internacional especialmente tenso por las guerras en Gaza y en Ucrania. Por todo el mundo se suceden las demandas de empleados que aún no han podido recuperarse de los estragos causados por la pandemia y la crisis económica posterior.

En Francia, más de 5.000 agentes están desplegados en París, donde las autoridades temen que las manifestaciones de hoy se conviertan en escenario también de protestas contra la ofensiva de Israel en Gaza. De hecho, en la Universidad de la Sorbona se han producido ya protestas estudiantiles en consonancia con las que están recorriendo Estados Unidos. En la ciudad de Saint-Etienne, el candidato del Partido Socialista Francés, Raphaël Glucksmann, ha tenido que abandonar la manifestación después de ser increpado por manifestantes propalestinos que le han lanzado pintura.

También más de 5.000 policías vigilan las manifestaciones convocadas por grupos anticapitalistas en Berlín. Las autoridades germanas han avisado ya de que actuarán ante cualquier indicio de delitos antisemitas o de incitación al odio contra los judíos. También hay un importante despliegue en Hamburgo de cara a las manifestaciones en esa ciudad que, como en prácticamente toda Alemania, tendrán lugar por la tarde.

A primera hora, el canciller Olaf Scholz ha publicado un mensaje en redes sociales en el que reconoce además que "mucha gente en Alemania está trabajando duro y recibiendo poco dinero". Scholz ha destacado por ello la importancia de mantener los subsidios en el país tanto a la vivienda como por hijo.

Huelga en Grecia y gran despliegue policial en Estambul

Los principales sindicatos de Grecia han convocado una huelga general para exigir un aumento de los salarios. Al paro se han sumado los marineros helenos, por lo que hoy están en puerto los barcos que conectan por ejemplo Atenas con las islas. Tampoco está funcionando con normalidad el metro de la capital, que dejará de ofrecer servicio a primera hora de la tarde. Desde el amanecer, manifestantes griegos se han acercado al edificio del Parlamento heleno con banderas palestinas.

En Turquía, el gobierno de Erdogan ha desplegado a decenas de miles de policías para evitar que los manifestantes se concentren en la histórica Plaza Taksim, lugar tradicional de protesta ciudadana en Estambul. De hecho, se han producido ya decenas de detenciones a pesar de una reciente decisión del Tribunal Constitucional en la que ha confirmado que no se puede prohibir una manifestación en ese lugar durante el Primero de Mayo.

Otro país que vive esta fecha de una manera especial es Portugal, que recuerda el Primero de Mayo de 1974, celebrado apenas días después de la Revolución de los Claveles que tumbó la dictadura en ese país.

En aquella fecha se celebraron manifestaciones multitudinarias de las que ahora se cumplen 50 años. Los principales sindicatos lusos salen a la calle además para reclamar mejoras salariales y un mayor diálogo social con el nuevo gobierno liderado por el conservador Luis Montenegro.

Por último, miles de personas han salido a la calle a exigir también mejoras salariales en distintos países del sudeste asiático. En Corea del Sur, los manifestantes han exigido la dimisión del gobierno y la revisión de las leyes laborales del país en un contexto de dura respuesta de las autoridades a las huelgas. En Filipinas, por su parte, se han registrado enfrentamientos entre manifestantes y policía.

Amplias jornadas

Coincidiendo con este Primero de Mayo, Eurostat ha publicado la estadística de trabajadores europeos por país que trabajan 49 horas o más a la semana. En esta situación se encuentran 1 de cada 10 trabajadores en Grecia, Francia y Chipre. En el caso de España, un 6,7% de los empleados afronta jornadas de esa duración, mientras que en los países Bálticos, Rumanía y Bulgaria se registran los porcentajes más bajos.

Ampliar

Las jornadas laborales más largas se dan entre los trabajadores de la agricultura y los que desarrollan su labor en el mar. En estos sectores, prácticamente 1 de cada 4 empleados trabajan más de 49 horas a la semana. Además, el número de autónomos que emplea tantas horas (un 29%) supera por mucho al de los empleados por cuenta ajena (algo más del 3%).