El PP ganaría las elecciones europeas con un PSOE que resiste a pesar del subidón de las derechas

Las urnas europeas vienen con subidón para las derechas. Según el barómetro de 40 dB para la Cadena SER y El País el PP ganará los comicios sacándole tres europarlamentarios de ventaja al PSOE. La lista encabezada por Dolors Montserrat se adjudicaría un 33,5% de los votos y los socialistas dirigidos por Teresa Ribera se apuntarían un 30,1% de los sufragios válidos. Ya a mucha distancia al tercer cajón del podio se subiría Vox con un 12,6% de las papeletas en su zurrón. Sumar se quedaría en un 5,7% de estimación de voto, seguido de Ahora Repúblicas (4,6%) y Podemos (4%).

Los populares crecen 13,4 puntos respecto al 20,1% que amasaron allá por 2019. El PSOE que ganó aquella cita europea se tendría que conformar con 2,7 puntos menos respecto a los que juntaría ahora.

Si comparamos los resultados y el reparto de escaños con lo ocurrido en la última cita europea en mayo del año 2019 observamos desplazamientos muy significativos en el espectro conservador y poco movimiento entre los partidos de izquierda. Los cambios vienen mediatizados por la práctica desaparición de Ciudadanos y por el aumento en el número de escaños (de 54 a 61) que se reservan para España a raíz del Brexit y la ampliación del Parlamento Europeo. Los siete eurodiputados que C’s cosechó en 2019 son historia y ese botín se lo reparten entre el PP, Vox y el PSOE. Los populares de Feijóo casi duplicarían el número de escaños que cosechó el Partido Popular encabezado por Casado hace cinco años, pasando de los 12 europarlamentarios actuales a 23. Los socialistas lograrían retener los 20 asientos que ostentan ahora mismo. Vox experimentaría un estirón importante y sus tres actas se transformarían en ocho. Los seis de Unidas Podemos menguan y se dividen; Sumar reservaría 3 sitios en el Europarlamento y los morados se quedarían con 2. El conglomerado republicano de ERC, Bildu, BNG retendría sus tres representantes, mientras Junts se queda con uno (pierde uno) y la Coalición por una Europa Solidaria (que integran entre otros PNV y Coalición Canaria) conseguiría mantener su único sillón.

Festín a costa de ciudadanos

La transferencia de voto respecto a los comicios de hace cinco años explica cómo se ha repartido el pastel naranja. Casi un 30% de los antiguos votantes de Ciudadanos seguirán inasequibles al desaliento y repetirán voto, pero según la encuesta un 33,4% cogerán ahora la papeleta del PP, un 11% la de Vox y un 10,2 votarán socialista.

El resto de las formaciones conseguirían mantener bastante amarrados sus apoyos, excepción hecha de Unidas Podemos que ahora se los reparte con Sumar. El PP obtendría el respaldo de un 81,6% de los votantes que ya optaron por su lista en los eurocomicios de 2019. Eso sí, un 10,5% de esos antiguos seguidores se pasarían ahora a la ultraderecha. Precisamente Vox es el partido que mejor ata sus votos; repetirían el 81.8% de sus electores. El PSOE lograría fijar al 73,9%, pero un 4,6% optarían este junio por la lista de Génova.

Otras papeletas que se desperdigan son las de Unidas Podemos; Un 42,6% de sus seguidores de 2019 volverían a elegir el color morado en esta cita europea, pero un 31,5 se marcharían a Sumar y un 11,8% al Partido Socialista. El resto de las propuestas mantienen unas cifras muy similares a las cosechadas hace cinco años.