El Gobierno ha solicitado la retirada del orden del día del pleno del Congreso del proyecto de ley de reforma de la Ley del Suelo a primera hora de la mañana, al no contar con los votos suficientes para garantizar su tramitación. La ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, ha explicado a las puertas del Congreso que el Gobierno renuncia a que sea proyecto de ley y que deja el texto en manos de los grupos para volver a tramitarla: «La política de vivienda no está en campaña electoral. Espero que esta norma se aproveche cuando pasen las elecciones». Rodríguez se ha mostrado satisfecha por haber cumplido su palabra «con los ayuntamientos y las comunidades autónomas que pidieron esta ley» y que el sector quiera contribuir a ello. «No he escuchado ni una sola voz de ningún ayuntamiento o comunidad autónoma o urbanista que le haya puesto una sola pega a este texto. Ha sido un texto dialogado», ha defendido. La ministra ha apuntado que «era una ley que solventaba y daba seguridad jurídica» y que «se adaptaba a los nuevos tiempos», además de estar alineada con la agenda urbana. Por eso pide que se tengan en cuentas la propuestas que incluía: «El texto es un buen texto así que no partamos de cero. Espero que el PP reflexione y atienda a demandas». Ha señalado además que habían negociado con el PP y el sector «y los alcaldes están sorprendidos» y lamentaba que el PP hubiera pasado de la abstención al voto en contra en las últimas horas. «Este texto ha tenido tres enmiendas a la totalidad y siempre contamos con el PP para sacar esta norma», ha recordado. «La política de vivienda no está en campaña electoral. Espero que esta norma que pongo en manos de los grupos y se aproveche cuando pasen las elecciones», desea la ministra, que constata «con pesar» que «el nerviosismo electoral sobrepasa el interés general». Cree que «una parte de los socios no tienen implicación en el municipalismo» como tienen el PP y el PSOE. «Ante la desesperanza del sector, pongo este texto en manos de los grupos para darle forma», anunciaba. Sobre las críticas de Podemos, que vincula esta reforma de la ley del Suelo con la «Operación Chamartín», la ministra ha admitido desconocer en qué punto se encuentra los planes urbanísticos en esa zona de la capital: «Entiendo que el Ayuntamiento de Madrid está descontento». Rodríguez argumenta que la normativa mejoraba aspectos técnicos y tenía un bajo perfil ideológico: «Esta ley quería promover un parque público. Sin suelo no se puede promover vivienda». Lamenta que el PP no la haya apoyado «porque el sector les ha rogado apoyar la ley»: «Lamento que haya dejado el interés general», sentenciaba.