Biólogos dan respuesta a uno de los fenómenos más preocupantes en Gibraltar: por qué las orcas atacan a los barcos
Desde mayo de 2020 ha habido casi 700 interacciones documentadas entre estos animales marinos y las embarcaciones
Madrid
Hace cuatro años aproximadamente empezó a producirse un cambio en aguas del Estrecho de Gibraltar. Allí cada vez viven menos orcas ibéricas —solo quedan unas 40— y comenzaron a experimentar un cambio de comportamiento: dar golpes de timón a los barcos y cada vez lo hacían con más intensidad y frecuencia.
Durante estos años se han vivido numerosos momentos de peligro, como cuando atacaron a los participantes de la Ocean Race el año pasado, y organizaciones ambientalistas como CIRCE han presentado al Gobierno central planes con medidas urgentes. También se han hecho diversos estudios durante este año para analizar su comportamiento. Ahora, desde el Instituto de Bienestar Animal, tienen claro que lo que hacen las orcas no es una agresión, sino un juego fuerte.
"Desde mayo de 2020 ha habido al menos 673 interacciones documentadas entre estas orcas, que son los depredadores oceánicos más poderosos, y embarcaciones pero ese comportamiento tiene más en común con un juego recio que con la agresión", señala la bióloga marina Naomi Rose.
Había muchas teorías sobre por qué está ocurriendo esto. Como a partir de 2020 se intensificaron las embestidas a los barcos, muchos pensaron que tenía que ver con la repentina reanudación de las actividades náuticas después de la pandemia. Otros científicos hablaban de la escasez de alimentos y la posibilidad de que las orcas vieran a las embarcaciones como competencia a la hora de conseguir presas.
El también biólogo marino Alex Zerbini —presidente del comité científico de la Comisión Ballenera Internacional (CBI) y miembro de un grupo de trabajo formado por los gobiernos español y portugués— aclara que lo más probable es que el comportamiento de las orcas sea una nueva "tradición cultural" sin un propósito concreto.
En la mayoría de los incidentes documentados una manada de orcas golpea el timón de naves pequeñas y luego se alejan a gran velocidad. En ningún caso las orcas han atacado a las personas a bordo de las embarcaciones. Naomi Rose incide en que "una vez que rompen el timón juegan con los pedazos y luego se van. En todo ese período solo han causado el hundimiento de siete naves".
Esta bióloga destaca que esas orcas —"una población marina en peligro crítico"— son muy inteligentes: "Si quisieran hundir el bote lo harían, pero la meta parece ser el embate con el timón y solo en el 20% de los incidentes han dañado la nave dejándola incapacitada para navegar". Una conclusión a la que también llegaron los expertos convocados en Madrid para el taller auspiciado por la Comisión Ballenera Internacional y los gobiernos de España y Portugal.
Las orcas ibéricas son una población marina en peligro crítico. Se caracterizan por una cabeza roma, una capa dorsal negra con poco contraste y se alimentan principalmente de atún rojo.
¿Cómo evitar que se acerquen a los barcos?
Durante años los navegantes han usado diferentes métodos para repeler a las orcas ibéricas incluidas acciones ilegales como el lanzamiento de fuegos artificiales, derrame de gasolina en el agua o pequeños explosivos. Entre las medidas que son legales porque no dañan a las orcas y pueden disuadirlas, la bióloga Naomi Rose señala la modificación de los timones "en una manera que no afecte la navegación pero hace el timón menos divertido, menos atractivo", y la colocación alrededor de la nave de cuerdas pesadas. "Por alguna razón, no sabemos cuál, a las orcas no les gustan las líneas verticales en el agua", explica.
Otra medida es la comunicación en tiempo real a los navegantes acerca del sitio donde se encuentran las manadas de orcas, de las cuales parece haber cinco en esta población cuyo hábitat va desde el estrecho de Gibraltar a las aguas frente a Galicia.
La subpoblación ibérica de las orcas se caracteriza por una cabeza roma, una capa dorsal negra con poco contraste y se alimenta principalmente del atún rojo.