Miguel Ríos: "El motor de mi vida ha sido la gente que compra entradas y hace colas"

Madrid

"Esta profesión se convirtió en vocación desde el momento en que me emocionó", comenta Miguel Ríos. El artista cumple ochenta años la semana que viene y lo hará rodeado de sus amigos y su público en el concierto '80 años. Granada All Stars', que tendrá lugar en su ciudad natal. Miguel recuerda como una llamada divina el momento en el que sacó el vinilo de Hound Dog de Elvis Presley en una tienda de discos en Granada: "Fue casi una anunciación".

En sus primeros años el cuidado de la voz no era su fuerte. Pero con el tiempo y su larga carrera confiesa que le dio miedo desilusionar a su publico y se tomó más en serio su ejercicio. "El motor de mi vida ha sido la gente que compra entradas y hace colas", agradece Ríos. Porque si hay algo que ha acompañado al rockero durante toda su trayectoria son las muestras de cariño hacia su público.

El 8 de junio le arroparan sus amigos Ana Belén, Víctor Manuel, Joan Manuel Serrat e Iñaki Gabilondo después de que sople las velas y antes de su actuación. "He tenido mucha suerte en la vida con todos los que me han rodeado y me gusta mostrarles mi respeto porque les admiro", reflexiona el cantante. Sus seguidores también podrán disfrutar de la música de Los Ángeles, Lagartija Nick, Niños Mutantes y Anni B Sweet.

Con 65 años, Miguel Ríos dio un punto de inflexión a su carrera con una aparente retirada. "Lo dejé y me puse a escribir mis memorias con la facilidad de que me lo sabía todo: el argumento, los personajes, y todo lo que se me olvidaba estaba en Wikipedia", dice el artista. Pero se ha cumplido lo de que las leyendas nunca se van, y ahora con ochenta Miguel se reafirma en que "está loco por cantar".

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