Joaquín Oristrell: "Me reencontraría con Verónica Forqué y Rosa María Sardá"
El director y guionista, que lleva más de 40 trabajando con los grandes actores de este país, recuerda algunos de los capítulos más importantes de su carrera junto a Mara Torres
Madrid
El nombre de Joaquín Oristrell está vinculado a la historia del cine español desde hace más de cuarenta años. Él firmó muchos de los guiones que marcaron la década de los 90, como Bajarse al moro, Salsa rosa, ¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo? o El amor perjudica gravemente a la salud. Películas que, además de abrir camino, reivindicaron el cine de autor desde la comedia cosechando un éxito detrás de otro. Sin embargo, no es tan conocido su vínculo profesional con el grupo infantil Parchís: "La niña de amarillo, Yolanda, la hija del trompetista, es mi prima hermana. Me contrataron para hacer como de Mery Poppins porque nadie se ocupaba mucho de ellos. Eran muy gamberros, tiraban sillas desde la terraza del hotel para ver qué pasaba, y dijeron esto no puede ser", explica.
Joaquín Oristrell: "Me reencontraría con Verónica Forqué y Rosa María Sardá"
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Parchís fue uno de los grupos infantiles más populares de los 80. Una banda compuesta por Tino Fernández, Yolanda Ventura, David Muñoz, Oscar Ferrer y Gemma Prat en su primera etapa, que se hizo famosa por canciones como Cumpleaños feliz, La Canción de Parchís o Comando G. Vendieron 14 millones de discos, protagonizaron siete películas en menos de tres años y se calcula que pudieron llegar a generar unos beneficios de 800.000 millones de pesetas (unos 4'8 millones de euros). Llenaban estadios, hacían giras de meses por Latinoamérica y miles de personas se agolpaban en el aeropuerto para esperar su llegada. Eran como Rolling Stones de los niños. "En el pabellón Azteca había, ponte, 6.000 personas. Empezó a llover y lo que llovía era el sudor que se evaporaba y caía. Caía lluvia de sudor", cuenta Oristrell. Tocaron la gloria y saborearon la ruina, viviendo las luces y las sombras de un mundo de adultos, lleno de intereses, que ni siquiera entendían. "Estaban explotados", asegura.
Su trayectoria es tan variada como apasionante. Y es que ese hijo único que creaba historias en la trastienda de la tintorería de su madre, que aprendió a leer y a escribir gracias a Doña María, una vecina que era medio monja medio maestra, y que acudía semanalmente a la sesión doble en los cines Cervantes de Barcelona, terminó siendo el vicepresidente de la Academia de Cine cuando la famosa gala de los Goya del "No a la guerra" y trabajando de la mano de Manuel Gómez Pereira, con quien formó uno de los tándems más taquilleros del cine español.
A sus 70 años, Joaquín Oristrell sigue teniendo fuelle y, con varios proyectos entre manos, piensa que "la vejez es la etapa perfecta para hacer las marcianadas que le gustan". Y, antes de despedir la entrevista con Mara Torres, ha recordado a dos grandes amigas que ya no están: Rosa María Sardá y Verónica Forqué. "Porque, insisto, lo que te dan los años, aparte de esas chorradas de la experiencia, la calma y no sé qué, es la gente que se te va".
Elena Sánchez
Redactora y productora en Cadena SER. Hablar por Hablar (2013 - 2018) y en el Faro (2018 - actualidad)....