Freud en el cine
Acaba de llegar a los cines La última sesión de Freud, que cuenta un posible encuentro entre el famoso psiquiatra y el escritor C. S. Lewis. Anthony Hopkins interpreta al padre del psicoanálisis, pero no es el único actor que lo ha hecho a lo largo de la historia del cine.
El impacto cultural que tuvo el psicoanálisis convirtió a Sigmund Freud en una de las figuras intelectuales más destacadas del siglo XX. También en una de las más polémicas. Y desde luego, una de las más reconocibles y populares. Incluso las personas que no saben nada de su vida o de su obra, conocen o han oído hablar de Freud.
El cine y el psicoanálisis nacieron al mismo tiempo, pero parece que a Freud no le gustaban las películas. Dicen que apreciaba los filmes de Charlot y admiraba a Chaplin, pero consideraba el cine un entretenimiento propio de personas no ilustradas. En las pocas películas documentales o caseras en las que aparece se le nota incómodo ante la cámara. Rechazó una suculenta oferta de Samuel Goldwyn para hacer de asesor en una película y censuró que dos de sus discípulos, Karl Abraham y Hanns Sachs, colaboraran en la que se considera la primera película psicoanalítica de la historia: Misterios del alma, dirigida en 1926 por el alemán Georg Wilhelm Pabst.
Pero si Freud no se interesó por el cine, éste en cambio sí se ha interesado por él. Hay más de 30 películas en las que aparece como protagonista o personaje secundario y ha sido encarnado en la pantalla por grandes actores. Montgomery Clift le daba vida en la primera película que abordó al personaje. Se trata de Freud, pasión secreta, dirigida en 1962 por John Huston. La película abarcaba varios años de su vida, mostraba algunos de sus casos clínicos más conocidos y el desarrollo de sus teorías. Desde la investigación de los traumas infantiles a su teoría del sexo; la utilización del hipnotismo para penetrar en el subconsciente o la interpretación de los sueños. Huston encargó el guion al filósofo Jean Paul Sartre que presentó un libreto para una película de ocho horas que resultaba imposible de filmar. La productora lo recortó y modificó y como consecuencia Sartre pidió no aparecer en los créditos.
Aunque solo abarcaba unos años de su vida Freud, pasión secreta, tenía el estilo típico del biopic cinematográfico. En cambio, en la mayoría de las películas en las que aparece el personaje lo hace en algún periodo concreto de su vida. Por ejemplo, en El vendedor de tabaco, película del año 2018 protagonizada por el actor Bruno Ganz, vemos a un Freud anciano a punto de abandonar Viena ante la inminente anexión nazi de Austria. En la película El día en que Nietzsche lloró, contemplamos a un joven Freud que ayuda a su mentor, el doctor Josef Breuer, que en esos momentos trata al filósofo alemán Friedrich Nietzsche. El consejo que le da este joven Freud, todavía no famoso, es que los dos se beneficien del tratamiento. Breuer curando de su depresión a Nietzsche y éste sacando al médico de su sentimiento de vacío.
Nietzsche y Freud aparecen también en la película Lou Andreas-Salomé, biopic de la célebre escritora rusa que fue amante del filósofo alemán y también del escritor Rainer María Rilke y que acabó convirtiéndose también en una destacada psicoanalista. Lou Andreas-Salomé fue una de las pacientes famosas que trató Freud. Como también lo fueron el compositor Gustav Mahler, tal y como se cuenta en la película Confesiones en un diván, o Marie Bonaparte, bisnieta de Napoleón y princesa de Grecia y Dinamarca. Catherine Deneuve le daba vida en una película para televisión titulada Princesa Marie, que contaba su relación con Freud. Pero si éstos fueron pacientes reales también hemos visto historias de ficción en las que Freud psicoanalizaba a Hitler, a Sherlock Holmes, a Leon Trotski o al mismísimo conde Drácula, tal y como sucedía en la comedia austriaca El vampiro en el diván.
Una de las películas más conocidas en las que aparece Freud es Un método peligroso de David Cronenberg. Vigo Mortensen lo interpreta en esta cinta, pero el verdadero protagonista es su colega Carl Jung. De hecho, la imagen de Freud que se da en el film, como un ser autoritario, pagado de sí mismo y que no tolera que se le contradiga, se basa en el retrato un tanto tendencioso que Jung plasmó de Freud en sus memorias.
El italiano Nani Moretti también utilizó a Freud para hablar de los vínculos maternofiliales en la película Sueño de Oro. Moretti interpreta a un director que rueda una película sobre Freud, al que vemos obsesionado por su madre. Otra imagen que también se ha utilizado de Freud en las pantallas es la del detective de la mente, imagen sugerida por lo que tiene de investigación el método psicoanalítico. En la película Elemental, doctor Freud, dirigida por Herbert Ross en 1978, el psiquiatra trataba al detective Sherlock Holmes de su adicción a la cocaína. Y a partir de ahí Freud, al que daba vida el actor Alan Arkin, se veía envuelto en una trama detectivesca en la que corría todo tipo de aventuras.
También en una serie producida por Netflix en 2020 y titulada simplemente así, Freud, el doctor ayudaba a la policía a descubrir a un asesino en serie. No solo de esta serie de Netflix, Freud ha sido también protagonista de otras series como la que produjo la BBC en 1984 o personaje secundario en algunos capítulos de otras, por ejemplo, en Las aventuras del joven Indiana Jones, hablándole del amor a un todavía Indiana niño que se ha enamorado. El papel de Freud lo interpretaba Max Von Shydow. Son también varias las comedias en las que Freud aparece caricaturizado, satirizado y tratado con no mucho respeto. En Las alucinantes aventuras de Bill y Ted, dos estudiantes le traían desde el pasado para un trabajo de clase y Freud acababa siendo interrogado en comisaría.
En la comedia Loco de amor aparecía como un fantasma, interpretado por Alec Guinness, para reprender al psiquiatra Dudley Moore por su poca profesionalidad. Y en la película española Inconscientes solo le veíamos en un par de escenas hacia el final, pero el psicoanálisis estaba muy presente en esta comedia de enredos, dirigida por Joaquín Oristrell y protagonizada por Leonor Watling y Luis Tosar. Ahora con el estreno de La última sesión de Freud, el cine nos brinda una nueva oportunidad de aprender sobre el padre del psicoanálisis y su legado.