Carlos Alcaraz, maniatado por el servicio perfecto de Jack Draper en los octavos de final de Queen's
El español no podrá revalidar su título sobre la hierba
Contra las cuerdas como pocas veces se ha visto Carlos Alcaraz en una jornada a pedir de boca de su rival, el británico Jack Draper. En 'casa' en el torneo de Queen's, el tenista local sustentó su victoria en un servicio de ensueño, muy entonado con sus primeros saques y sin dar opción siquiera a una sola bola de 'break'. Tuvo que llegar la muerte súbita de la primera manga para empezar a desequilibrar la balanza, que se puso muy del lado de Draper desde el primer momento. El mismo guion tuvo continuidad inmediatamente después, concretando la caída del vigente campeón del torneo por un contundente 7-6, 6-3.
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Alcaraz vio concedido su deseo de jugar antes del España - Italia de la Eurocopa, pero no se encontró cómodo durante la primera hora de la tarde. Y no sólo influyó en ello su rival sobre la pista, sino que este partido dejó la curiosa imagen del reencuentro del murciano con las abejas, que estuvieron molestándole como en aquel recordado encuentro de Indian Wells meses atrás. Aparte del anecdótico incidente, tuvo gran culpa sobre todo el imponente saque de un Draper que no dio lugar a opciones de rotura. Es por ello que el primer 'set' avanzó sin sobresaltos. Y después de 12 juegos alternos sin bolas de 'break', el recurso del 'tie-break' se erigió como la única solución para dirimir el primer punto de estos octavos de final.
De primeras, el tanteo siguió su curso con juegos muy rápidos, sin posibilidades para sorprender al resto. Esta tónica comenzó a sacar de quicio a un Alcaraz que acostumbró a quedar a escasos centímetros de meter sus derechas ganadoras. Y para colmo, su esquema se vino abajo cuando estaba sirviendo con 3-2 en contra.
Draper aprovechó su primera opción de rotura para distanciarse a 4-2 en el segundo parcial, que supuso un gran golpe anímico. A partir de ahí, trató de rebelarse Alcaraz ante un Draper que ya saboreaba la campanada. Tuvo el de El Palmar el 'contrabreak' en su mano, pero desaprovechó la oportunidad y su candidatura acabó desmoronándose por completo en algo menos de dos horas. La posibilidad de revalidar el trofeo conseguido en 2023 se esfumó antes de lo previsto.