La pérdida de diputados de los liberales consolida a la extrema derecha como tercera fuerza en el Parlamento Europeo

Bruselas

El resultado de la votación al Parlamento Europeo del pasado nueve de junio, en el que la disputada tercera posición recayó en los liberales por encima de los ultraconservadores de ECR (grupo liderado por el partido de la primera ministra italiana Giorgia Meloni y donde se sienta Vox), dio paso a un "mercado de fichajes" de diputados que continúa hasta hoy. Hasta el cuatro de julio no se cierra la conformación de los grupos políticos, y hasta entonces los partidos pueden "pescar" diputados de otras familias (o de los no adscritos) y ensanchar sus escaños. En esa carrera están todos. El grupo liberal de Reniew Europa, que aunque retuvo la tercera posición, se dejó 21 escaños con respecto a las últimas elecciones, se quedó a solo 11 escaños de ECR. Una diferencia no lo suficientemente ancha para que la aritmética que ofrecía la proyección salida de las urnas pudiera cambiar con la conformación de los grupos en este mercado de fichajes. No hubo sorpasso electoral del grupo liderado por Meloni, pero ya lo está habiendo en las negociaciones. Porque la extrema derecha acaba de situarse como tercera fuerza en el Parlamento, por encima de los liberales.

El sorpasso llegó el 19 de junio, cuando ECR anunciaba el fichaje de varios diputados, entre ellos Mario Marion Maréchal (sobrina de Marine Le Pen) y otros dos diputados recién expulsados del partido ultra de Éric Zemmour; o tres diputados del partido ultraderechista rumano AUR. Entonces ECR sorpasó a los liberales posicionándose en tercera posición con 83 escaños. Tres más que Reniew. Pero el anuncio esta mañana de que uno de los partidos que forman parte del grupo liberal deja el grupo y saca a sus siete diputados, ha eclosionado a una formación que se quedaría con 74 diputados, nueve escaños menos que ECR.

Una gran pérdida para un partido que acababa de ser superado por ECR y que estaba convenciendo a los cinco diputados de VOLT para entrar en su grupo. Una decisión que va a votar la militancia del partido paneuropeo hasta el domingo, pero que apostaría, según han manifestado sus dirigentes, por integrarse en los Verdes.

Así que Reniew Europa se quedaría con un caladero de diputados cada vez más estrecho para pescar mientras que ECR va ensanchando su grupo consolidándose como la tercera fuerza en el hemiciclo. De mantenerse, tendrían más influencia en el Parlamento y daría alas a Giorgia Meloni para exigir más voz en las negociaciones del Consejo Europeo de la próxima semana en la que los 27 tienen que decidir el reparto de cargos en las instituciones comunitarias.