Las chapuzas más ingeniosas (o cutres) que algunos conductores intentaron utilizar para pasar la ITV con su coche
Puedes probar suerte jugando a ser MacGyver, pero realmente no te servirán
Las chapuzas más "ingeniosas" para intentar pasar la ITV. / TÜV Rheinland
Madrid
El año pasado se realizaron en España casi 22 millones de inspecciones técnicas de vehículos (ITV). Del total, cuatro millones de coches no pasaron la ITV en el primer intento, según datos de AECA-ITV. Además, el parque automovilístico español tiene una tasa de envejecimiento que supera en 4 puntos la media europea, ya que la media antigüedad de los vehículos está situada en casi 15 años.
Con estas cifras sobre la mesa, no es de extrañar que algunos jueguen a ser MacGyver para intentar ahorrarse unos euros en el taller, arreglando su viejo coche o más bien camuflando sus defectos con trucos caseros que solo comprometen su seguridad y la de los demás.
Más información
La multinacional especialista en servicios técnicos TÜV Rheinland ha recopilado algunas de las chapuzas más ingeniosas que pueden resultar curiosas, pero que no te servirán para pasar la inspección técnica:
- Manualidades infantiles en la etiqueta de la ITV. Todos los vehículos están obligados a llevar una pegatina que acredite la vigencia de la ITV. No llevarla puede suponer una multa de unos 100 euros y llevar tantas que limiten la visibilidad una de 200 euros. Además, al considerarse documento oficial, cualquier tipo de manipulación es un delito de falsedad documental y puede conllevar multas de 6.000 a 12.000 euros y penas de cárcel de 3 a 6 meses.
- No todo se soluciona con cinta adhesiva. Muchos intentan tapar desperfectos del vehículo usando cinta aislante para disimular durante la inspección. No solo no ayudará a pasar la ITV, sino que además es sancionable. Llevar la carrocería del vehículo con elementos cortantes es motivo de multa.
- Costura, grapas o ataduras. Algunos conductores llevan la costura a un nuevo nivel al remendar cinturones de seguridad con hilo y aguja o directamente con grapas. Al tratarse de la ITV, los detalles en los elementos interiores de los vehículos suelen parecer secundarios. Sin embargo, lo que parece un gran apaño a primeras puede implicar graves consecuencias para la seguridad vial.
- Espejos comunes en lugar de retrovisores. Se han dado casos en que las personas reemplazan los retrovisores por espejos. Ni que decir tiene que esta práctica supone gran riesgo para la seguridad vial, ya que son elementos críticos para la visibilidad del conductor.
- Manipulación de los sistemas de emisiones de gases. Cada vez es más común trucar los sistemas de escape o los filtros de partículas para que los niveles de emisiones aparenten estar dentro de los límites permitidos. Esto no solo es ilegal, sino que también perjudica al medio ambiente.
En una inspección técnica de vehículos (ITV), este tipo de modificación podría resultar en una evaluación desfavorable o negativa. “Al finalizar la inspección, si el resultado es favorable con fallos leves, tendrás que subsanarlos, pero no tendrás que volver a pasar la inspección", explican los expertos de TÜV Rheinland. "No obstante, en caso de que presente defectos graves o muy graves, el resultado podrá ser desfavorable o negativo respectivamente. En este último caso, el vehículo no podrá circular ni para ir al taller y solo podrá utilizar los servicios de una grúa o remolque para transportarlo".
La multa por circular con un vehículo cuya ITV está caducada es de 200 euros (100 euros con pronto pago). Ahora bien, si se circula con ITV negativa, la sanción asciende a 500 euros, sin posibilidad de rebaja por pronto pago.
