Este verano será uno de los más caros de la historia: los precios en la costa se disparan hasta un 10%
Siete días en la playa costarán 1.300€ de media en agosto
Madrid
Este verano será uno de los más caros de la historia. Los portales especializados en comparar precios apuntan a que van a subir en torno a un 10% respecto a 2021, cuando España empezaba a recuperarse tras la pandemia.
En total, de media, siete días en primera línea de playa costarán más de 1.300€. Esa cifra se dispara hasta los 1.700€ en provincias como Cádiz o Barcelona.
Vuelve a triunfar la costa
Este verano vuelve a triunfar la costa, sobre todo en las ciudades que cuentan con aeropuerto. “Las islas Baleares y Canarias, también Andalucía, que es la región más solicitada por el turista nacional, las costas de Cataluña y de Levante. Los españoles siguen en esa búsqueda del turismo de sol y playa, popular en época de verano”, explica José Manuel Lastra, vicepresidente de la Confederación Española de Agencias de Viajes.
Lastra cuenta que han subido los precios pero con matices: “Las vacaciones serán algo más caras, lo hemos visto en el dato del IPC, pero es verdad que hemos observado una ralentización respecto a 2023. Hace justo un año la hostelería estaba cinco puntos por encima”.
Además, este verano, según José Manuel Yzuel, presidente de la Confederación de Hostelería de España, crecerán los destinos del norte de España: “Con el cambio climático que provoca estas olas de calor, es más atractiva esta parte del país que soportar los más de 40 grados que marcan los termómetros de otros territorios”.
Los españoles buscan alternativas a la inflación: menos días y destinos de interior
La llegada de turistas estadounidenses o asiáticos está incrementando la facturación del sector hotelero, especialmente en las grandes ciudades y más aún cuando estas tienen playa. Suben los precios y, por tanto, el turista español busca alternativas que no pasen factura a su bolsillo, como reducir los días de vacaciones o el consumo. El presidente de Hostelería de España cuenta que “cada vez son más los españoles que ahora, en vez de salir cinco veces, salen tres; o que, en vez de tomar cuatro cañas, toman dos”.
Aunque la principal alternativa, apuntan desde el sector, es elegir los destinos de interior, más accesibles para el bolsillo. “Son cada vez más los clientes que ven en este tipo de turismo una alternativa al sol y playa para las vacaciones de verano, y también son muchos los destinos de interior que están haciendo una apuesta sólida ofertando actividades o habilitando infraestructuras adecuadas para atraer a la clientela vacacional”.
En cualquier caso, pese a los precios disparados, los españoles no renuncian a sus vacaciones. De hecho, las reservas se han incrementado ligeramente respecto al año pasado, y desde la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) aseguran que subirán también el año que viene.
Pilar Díaz de Aguilar
Graduada en Derecho y Periodismo por la Universidad CEU San Pablo. Máster en la Escuela de El País....