Patricia Franquesa, víctima de extorsión sexual: "Me da terror que me vuelva a escribir porque el malo sigue online"

Madrid

Imagínese que un día está de viaje y en un bar le roban su portátil. Si ha pasado por ese mal trago, seguro que se acuerda de ese momento en el que uno pasa del cabreo hacia el ladrón, al reproche a uno mismo. ¿Cómo no me he dado cuenta? Es la pregunta que nos haríamos todos, pero la situación puede empeorar. Imagínese que unos meses después, cuando usted ya ha pasado de pantalla, llega un correo electrónico que le pide que pague 2.400 dólares a cambio de que no se difundan sus fotos íntimas. Parece ficción, pero es la realidad al a que se enfrentó Patricia Franquesa.

"El título previo del documental iba a ser Ole mi coño", bromea Patricia Franquesa que acaba de presentar su documental 'Diario de mi sextorsión'. En el documental narra cómo fue el chantaje al que fue sometida: "Me sentí bastante desprotegida y usé el documental para protegerme". El documental ya se ha estrenado, pero lejos de sentirse más empoderada, reconoce que se siente "más expuesta", porque siente terror por si "el malo que sigue online le vuelve a escribir"

El hacker tenía acceso a toda su información, a sus movimientos y se lo hacía saber. En una ocasión, ella tuvo que viajar a un festival de cine y, cuando volvió, el hacker le preguntó "qué tal vacaciones". En ese momento, se dio cuenta de que "le estaba observando" y sentía que había un "fantasma tecnológico" que la iba siguiendo.

El robo fue en 2019. De momento, no sabe quién la chantajeó, pero sí tiene los datos de la persona que le robó el portátil en un bar de Madrid. La gran incógnita, la de qué hizo esa persona con su ordenador, está sin responder todavía. Franquesa no sabe qué mueve a un hacker a actuar así y no quiere "pensar que sea maldad", prefiere creer que era alguien "con necesidad". Sin embargo, también detectó que era alguien "retorcido", que estuvo dispuesto a acosarla durante "dos meses". "No sé si era alguien que tenía algo personal contra mí o alguien que estaba en Costa de Marfil con un ordenador y un hijo enfermo".