Internacional

La Guardia Civil lidera la lucha europea contra el tráfico de armas en Ucrania: 300.000 han desaparecido desde el inicio de la guerra

Las fuentes oficiales consultadas por la SER aseguran que no se ha detectado ningún incidente verificado de tráfico de armas desde Ucrania a países de la UE

Armas sin control

Desde el inicio de la guerra se han reportado de forma mensual cada una de las armas cortas y ligeras que se han perdido o que han sido robadas en Ucrania, desde las que han desaparecido en primera línea del frente de batalla o las que han sido robadas de los arsenales. Según fuentes oficiales consultadas por la SER, se calcula que desde el inicio del conflicto con Rusia, más de 300.000 armas de fuego se han esfumado en Ucrania, aunque hay otras estimaciones que lo elevan incluso a más de 593.000, según los datos recopilados por el organismo Global Initiative Against Transnational Organized Crime (GI-TOC) que desde hace años dirige un programa de monitoreo de armas para rastrear los flujos de armas desde Ucrania hacia Europa.

Uno de los grandes retos de las autoridades es seguir la trazabilidad de cada una de esas armas. Todas tienen sellos y un número de serie para poder seguir su rastro, pero los expertos consideran que esas marcas son insuficientes para lograr un seguimiento efectivo. Se está trabajando ya en implementar la tecnología con nuevas técnicas que permitan rastrear de forma más segura el origen de cada una de las armas que acaban en el mercado negro.

La Unión Europea puso en marcha en 2014 la Plataforma Multidisciplinaria Europea contra las Amenazas Criminales (EMPACT en sus siglas en inglés) para identificar, priorizar y abordar las amenazas que plantean el crimen organizado, poniendo un especial énfasis en el tráfico de armas, al considerarse una de las diez prioridades de los Estados miembro. Desde 2020, ese equipo está liderado por una comandante de la Guardia Civil con una larga trayectoria en esa batalla. Su trabajo es vital. A raíz de la invasión rusa sobre Ucrania, esta unidad se dedica casi en exclusiva a prevenir el tráfico ilegal de armas en suelo ucraniano, tejiendo una estructura sólida con las autoridades de este país para que tenga un sistema de distribución de armas robusto, capaz de repartir ese armamento de forma controlada, evitando que esos fusiles y pistolas acaben en el mercado negro al alcance del crimen organizado o de grupos terroristas. La tarea no es sencilla, hay factores incontrolables, por ejemplo, en el frente de batalla donde “no todas las divisiones responden de forma igual al control de distribución de armamento fijado por el gobierno ucraniano”, detallan las fuentes consultadas.

El ejemplo de los Balcanes, tras la guerra de los 90, demuestra el riesgo de la proliferación de armas en el mercado negro una vez termine el conflicto. A día de hoy, décadas después, las mafias todavía se nutren de las armas que se repartieron entre la población civil durante la guerra de los Balcanes, de hecho, ese territorio sigue considerándose como una de las principales fuentes de suministro de armas ilegales de toda Europa.

Biden anuncia que cinco países de la OTAN enviarán sistemas de defensa aérea a Ucrania

El temor de todos los expertos consultados por la SER es que Ucrania siga estos pasos y acabe convirtiéndose en una nueva gran fuente del tráfico de armas, “siempre pasa en las zonas postconflicto, ese riesgo real, ese riesgo claramente existe, podría darse una situación similar, con una diferencia, en Ucrania hay muchas más armas que las hubo en los Balcanes", alerta a la SER el Director del Observatorio GI-TOC sobre la Delincuencia Organizada en Europa, el Daniel Brombacher. Para evitar que eso ocurra el equipo EMPACT de la UE contra el tráfico de armas colabora activamente con la Policía ucraniana, con quienes mantienen un contacto diario, también con el personal de Aduanas y de Fronteras, una colaboración gracias a la cual han logrado operaciones de alto impacto. Desde el EMPACT defienden el trabajo “impecable de la policía ucraniana” que a pesar de las durísimas condiciones en las que tiene que funcionar consiguen implicarse al “máximo” en el control de estas armas. Desde la unidad de lucha contra el tráfico de armas de fuego se está ayudando a Ucrania a diseñar un centro de coordinación, que funciona desde junio, desde donde se documenta todo el armamento que reciben, de tal forma que cada vez que se entrega un arma a la población civil queda registrado.

Según los expertos, el problema no son las 300.000 armas ucranianas que han desaparecido, sino las rusas que se han recuperado en el campo de batalla y que escapan a todos los controles: "El problema en un futuro podrían ser las armas ganadas en el campo de batalla, es decir, lo que conocemos como armas de botín que han sido recolectadas en los campos de batalla que sobre todo son de origen ruso. Según estimativos oficiales se calcula que Ucrania ha podido hacerse una cantidad de entre un millón y cinco millones de armas", advierte Daniel Brombacher.

Montenegro, el low cost del mercado negro

La munición en la zona de conflicto sigue escaseando, está muy cotizada, por eso su precio es extremadamente caro, ese factor incrementa su valor y, por tanto, el interés de las mafias. Los precios del armamento indican cómo está la demanda actual. Según fuentes consultadas en el EMPACT, por ahora, no se están viendo armas de Ucrania en manos del crimen de organizado europeo porque todavía sigue siendo más barato conseguir armas de fogueo que después retocan para convertirlas en artefactos fuego real o comprarlas en los Balcanes, que hacerse con un fusil procedente de Ucrania.

La UE se compromete con Ucrania a seguir apoyándole militar y económicamente

"Todavía siguen siendo muy caras en el mercado negro porque las necesitan", detallan las fuentes consultadas por la SER. Una muestra de esas diferencias de precio se analiza en la comparativa realizada por el Global Initiative Against Transnational Organized Crime con un AK47 en Europa, un fusil fácil de comparar porque es una de las armas que más figura en los arsenales de grupos criminales de todo el continente. Los datos recopilados demuestran que el país donde más barato es hacerse con un AK47 es Montenegro, allí su precio ronda los 320 dólares – el precio comparado hace referencia a las armas vendidas con munición, normalmente dos cargadores-, seguida de Albania con 430 dólares, Serbia con un rango entre 325 y 650 dólares, Macedonia del Norte con 540 dólares, Bosnia Herzegovina con 550 dólares y Kosovo entre 430 y 640 dólares. Esos precios están muy por debajo del valor de mercado que hay ahora mismo en Ucrania que ronda entre 1.000 y 1.500 dólares, aunque se venden más caras en Francia, donde el precio oscila entre 2.700 y 3.250 dólares.

"Las armas ucranianas no han llegado a Europa"

El último informe elaborado por este organismo, que abarca 2023 y principios de 2024, concluye que hasta el momento el tráfico de armas ilegales se ha limitado al interior de Ucrania, es decir, “no ha habido ningún incidente verificado de tráfico de armas desde Ucrania a países de la UE”. Esa misma tesis es defendida desde el EMPACT, las fuentes consultadas aseguran que no es cierto que hayan aparecido armas procedentes de Ucrania en grupos criminales que operan en España, tal y como ha trascendido en algunos medios de comunicación. “Es absolutamente imposible vincular esas armas con Ucrania”, zanjan estas fuentes. "Nosotros hemos realizado investigaciones sobre el terreno en Ucrania, también en varios países europeos que tienen frontera con Ucrania por el lado occidental y no hemos encontrado ninguna evidencia de que haya una oferta de esas armas ucranianas en el mercado negro", explica a la SER el Director del Observatorio GI-TOC, tras realizar un estudio exhaustivo en el mercado negro de la Dark web.

Zelenski denuncia nuevos ataques "masivos" de Rusia sobre Ucrania

La realidad es que existe en el mercado negro muchas falsificaciones de armas simulando que son modelos de última generación, cuando la realidad es que se trata de armas de fogueo trucadas.

Preocupación por los sistemas antiaéreos portátiles

Una de las mayores preocupaciones de los responsables de la lucha contra el tráfico ilegal de armas en Ucrania son los MANPADS, los sistemas antiaéreos portátiles, como por ejemplo los C90 donados a las tropas de Zelenski porque se ese material no figura actualmente bajo el radar de las armas cortas y ligeras que son registradas por las autoridades, un tipo de armamento muy deseado dada su versatilidad y gran poder de destrucción. Entre esas preocupaciones también están los drones de guerra, una tecnología muy letal y barata que puede acabar también en manos de los grupos del crimen organizado. Una muestra de esa inquietud es la preocupación del Departamento Seguridad Nacional (DSN) que teme que grupos terroristas 'calquen' con fines bélicos los drones civiles utilizados en la guerra de Ucrania. En uno de sus informes alertan de la proliferación de tutoriales que aleccionan sobre cómo reconvertir un dron civil en un arma de guerra: “Constituye un riesgo la difusión a través de redes sociales de la experiencia y el conocimiento de adaptación de drones comerciales o de uso civil con fines bélicos”, reconocen desde el DSN.

Javier Bañuelos

Redactor Jefe en la Cadena SER responsable de...