Los hospitales de Gaza, obligados a renunciar a la higiene y a las camas para pacientes: "Ni siquiera queda jabón"
La coordinadora de emergencias de MSF en Gaza cuenta que solo quedan operativos 13 de los 36 centros que había antes de la guerra
Los hospitales de Gaza, obligados a renunciar a la higiene y a las camas para pacientes: "Tenemos que ser creativos con los recursos"
Madrid
Las ambulancia están inmovilizadas y los hospitales completamente saturados. Solo esta semana, las tropas israelíes han evacuado dos de ellos y han obligado a cerrar una decena de instalaciones médicas. La guerra, que comenzó hace algo más de nueve meses, deja ya más de 38.000 palestinos muertos y más de 85.000 heridos en un terreno en el que recibir asistencia es prácticamente imposible.
"Antes de la guerra en Gaza había 36 hospitales funcionando. En la actualidad, 23 ya no funcionan, están cerrados. Y los 13 que quedan funcionan de manera parcial", cuenta Pascale Coissard, coordinador de emergencia de Médicos Sin Fronteras (MSF) en la Franja de Gaza.
Coissard se encuentra en el hospital Nasser, en Jhan Yunnis, al suroeste del enclave. Explica que el día a día es de mucho ajetreo: "Continuamente se recibe un flojo masivo de heridos en las emergencias. Cada ataque aéreo produce varios heridos y muchas muertes que colapsan la entrada. La rutina es encontrar un sitio para poder atenderlos y hay que ser creativos para garantizar un mínimo de control en las infecciones". Sin embargo, desde hace meses, apenas tienen suministros. Los médicos y enfermeros hacen lo que pueden trabajando sin descanso.
"No queda otra más que reducir las horas que un paciente puede estar en planta"
"En la planta de maternidad no se pueden quedar el tiempo necesario para asegurarnos de que no van a contraer una infección. Lo mismo con los bebés que acaban de nacer. No queda otra más que reducir las horas que un paciente puede estar en planta. Ni siquiera hay aprovisionamiento de jabón o de camas. Se están renunciando a muchísimas cosas", afirma la coordinadora de MSF.
Explica, además, que las consecuencias del colapso sanitario son devastadoras para la población gazatí, no solo para los heridos: "Lo que vemos es que la gran mayoría de las personas se esperan mucho antes de venir para algo que no consideran como grave.Lo que vemos también es que hay muchísimos pacientes a los que es difícil atender porque hay falta de aprovisionamiento de casi todo, hasta de las cosas básicas. No hay espacio físico para atender estas personas en condiciones, a veces se atiende en los pasillos de los hospitales. El personal hace lo que puede para salvar vidas", sentencia.
Pilar Díaz de Aguilar
Graduada en Derecho y Periodismo por la Universidad...