José Quiles accede a cuartos en boxeo y acaricia su primera medalla olímpica: "La gente tenía muchas ganas de ver al kazajo con el uzbeko y espero cargarme a los dos"
El español ha arrasado al boxeador kazajo Makhmud Sabyrkhan en octavos y ya está a un combate de la presea
El boxeo español apunta a lo más alto en los Juegos Olímpicos de París. Tras el estreno triunfal de José Quiles en la categoría masculina de -57kg, el número de boxeadores de la delegación española repartidos en cuartos de final de los distintos pesos asciende ya a cuatro. En un deporte en el que el pase a semifinales es sinónimo de medalla, al repartirse dos bronces, las expectativas se han disparado mirando al cuadrilátero. Así de crecido está también el propio Quiles, quien ha atendido al micrófono de la Cadena SER nada más convertirse en cuartofinalista olímpico este miércoles.
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Después de quedarse a las puertas en Tokio 2020, el boxeador ha asegurado ante Vincenç Batalla haberse liberado ya: "Ya me he quitado esa espina, como aquel que dice. Además aquí, con mi familia y todo. Está siendo un sueño y espero terminarlo con la medalla que más brilla".
Quiles selló su victoria en octavos después de un combate "muy duro", tal y como ha reflejado, pero orgulloso por que sus planes hayan salido "a la perfección". Ahora mira al frente, donde encarará unos cuartos de final por todo lo alto frente al reciente campeón mundial, el uzbeko Abdumalik Khalokov: "El siguiente es el uzbeko, que es el favorito. Es campeón del mundo del año pasado y lleva como un año y pico sin perder. La gente tenía muchas ganas de ver al kazajo con el uzbeko y espero cargarme a los dos", señaló el español apuntando a su careo del próximo 3 de julio, especialmente motivado después de su gran puesta en escena.
El eldense dominó este miércoles el cuadrilátero del Arena París Nord y se ganó el pase a cuartos de final de la categoría de 57 kilos en busca de las ansiadas medallas. Subcampeón de Europa, sabía que el camino hacia la medalla no sería sencillo en una competición tan disputada como París 2024, pero consiguió vencer tras tres asaltos complicados de los que se deshizo mareado y con un chichón: "Ya estamos en competición, el cuerpo no duele. Ya cuando termine la competición saldrán todas las agujetas y todo el estrés", comentó a este respecto.
El púgil logró desde el primer asalto bloquear los ataques de su adversario, esquivarlos y en el contraataque arriesgó con una serie de crochés, si bien Sabyrkhan le sorprendió con un estilo más agresivo en los últimos segundos. Esa misma estrategia siguió en el segundo asalto, cuando trató de arrinconar al español, que, más tarde, logró incluso que el kazajo acabase de rodillas sobre el cuadrilátero. Sin embargo, tuvo que pelear hasta el último segundo para contener los intentos del que fuese campeón del -54kg en 2023 y subcampeón en 2021.