El Dream Team conquista París y se cuelga el oro olímpico
La francia de Victor Wembanyama hizo un gran partido, pero los norteamericanos juegan en otra liga
Estados Unidos, liderada por LeBron James, Kevin Durant -que se convirtió en el más laureado del olimpismo, con su cuarto oro- y Stephen Curry, que fue el máximo anotador de su equipo en la final (24 puntos, todos de triple), cumplió las expectativas y logró su quinto oro consecutivo al derrotar en la final de baloncesto de los Juegos de París 2024 a la anfitriona, Francia (87-98).
En la repetición de la final de los Juegos de Tokio, la joven estrella gala, Victor Wembanyama, que lideró a su equipo durante todo el torneo, se conformó con acabar como máximo anotador, con 26 puntos, de un partido en el que también concluyó con la mejor valoración (25). Y en el que Francia cayó con orgullo. LeBron igualó en los Juegos de París los tres oros y el bronce que había ganado Carmelo Anthony -hasta el jueves pasado el baloncestista más condecorado de la historia olímpica-; pero Durant los superó a ambos al ganar su cuarto título.
Estados Unidos, dirigida por el no menos estelar Steve Kerr, con nueve anillos NBA -cuatro como técnico, los Golden State Warriors: todos con Curry y dos de ellos con Durant- llegó invicta a la final. Cuya ceremonia de apertura, en homenaje al teatro clásico francés (con tres bastonazos), fue oficiada por Tony Parker, leyenda de los San Antonio Spurs y de la selección gala, que hace poco le retiró su número, el 9. Y a la que asistieron, entre otros, el citao Carmelo Anthony, Scottie Pippen, uno de los integrantes del irrepetible 'Dream Team' que maravilló al mundo en los Juegos de Barcelona'92; y Pau Gasol, el mejor baloncestista de la historia de España.
La anfitriona, liderada por Wembanyama, pero para la que en los partidos del 'KO' destacó el madridista Guerschon Yabusele, lo hizo con una derrota: la que le infligió, en la fase de grupos de Lille, Alemania. De la que se vengó el jueves, derrotándola en la semifinal; después de haber dado cuenta en cuartos de la Canadá del español Jordi Fernández. El 'Team USA' se había dado un paseo hasta la semifinal, en la que se le atragantó la Serbia de Nikola Jokic -elegido de nuevo MVP la pasada temporada en la NBA, que había ganado la anterior con los Denver Nuggets-, actual subcampeona del mundo y que este sábado, horas antes de la final, se tomó otra revancha: capturando el bronce ante Alemania, que la había derrotado hace un año en la final del Mundial de Filipinas, Japón e Indonesia.
Serbia, dirigida por el magistral ex técnico barcelonista Svetislav Pesic, estuvo a punto de convertirse en la pesadilla americana, en un partido en el que llegó a tener una ventaja de 17 puntos y que acabó perdiendo por cuatro (95-91). El único en el que la gran favorita no había superado la centena. Francia quería dar el bombazo de los Juegos, arropada por su gente en el Arena Bercy, que retumba cada vez que suena La Marsellesa; y liderada por un Wembanyama que a partir de cuartos dio entrada, en la cabina de mandos gala, al madridista Guerschon Yabusele.
Kerr sacó, por primera vez en los Juegos, en el cinco inicial -en el que siempre habían entrado LeBron y Curry, los otros dos vértices del triángulo de poder estadounidense - al ya mítico Kevin Durant, en un partido que se abrió con un espectacular mate de 'King James' respondido por un triple de 'Wemby'. Una de tres de 'KD' adelantaba a los americanos (7-8) en un primer cuarto de cierta igualdad y alternancia, en el que una canasta de Bilal Coulibaly minimizaba los dos triples de Anthony Edwards que cerraron el primer cuarto (15-20).
Un contundente mate de Coulibaly colocaba un parcial de 10-4 y adelantaba a Francia (25-24) en el arranque del segundo periodo de un partido que contó entre los tres árbitros al español Antonio Conde. Durant culminada con un triple una brillante jugada entre James y Curry, respondida con un espectacular machaque por Yabusele, inconmensurable en la fase final y, con quince puntos, máximo anotador de la primera parte.
Devin Booker -el que más aportó al cuadro estadounidense durante los primeros 20 minutos: trece puntos, los mismos que Wembanyama-, lograba la ventaja máxima de los 'States', de diez (36-46), en la primera parte. Que concluyó con los galos a ocho (41-49). Yabusele se fajaba con un coloso en la pintura, y aunque con el acierto en triples de Curry (ocho de doce, al final) la distancia subía a catorce (47-61). Pero el juego interior galo era potente y Kerr tuvo que encomendar a Anthony Davis tareas de cierre.
Tras un error de entendimiento entre Durant y Anthony Edwards en la última posesión, Nando de Colo robó el balón, anotó y, en lugar de irse diez abajo, Francia llegó a seis (66-72), y con todo por decidir, al último cuarto. 'KD', algo impreciso con anterioridad, apareció para anotar un triple balsámico (68-77). Pero Francia buscaba el milagro. Y, con otro canasta de De Colo, un tiro libre de Yabusele y un mate de 'Wemby', se colocaba a tres (79-82). Pero cuando las cosas se ponían duras, aparecieron, sobre todo, Curry, que vino a Francia a por su primer oro ; y Durant, que fue el segundo anotador del equipo (15 puntos) capturó el cuarto. Para aumentar su leyenda. Y agigantar la del baloncesto estadounidense.