Este miércoles llegó el día que la afición madridista estaba esperando desde hace años: el debut de Kylian Mbappé con el Real Madrid. En Varsovia, en la final de la Supercopa de Europa entre Real Madrid y Atalanta, el delantero de Bondy se endorso la elástica blanca por primera vez desde su llegada al conjunto de Chamartín. Todos los focos estaban puestos en él desde que arrancó el calentamiento, donde fue ovacionado en numerosas ocasiones cuando tocaba la pelota. Una de las incógnitas era saber en qué posición del campo se iba a colocar la estrella gala. Desde los primeros compases de juego, Kylian Mbappé actuó como delantero de referencia del tridente que compone junto a Vinicius y Rodrygo. Su primer contacto con el balón en el área llegó en el minuto 14 de encuentro. Fede Valverde sirvió un pase atrás para el francés, que disparó de primeras contra el cuerpo de De Roon. El delantero galo continuó buscando entrar en el juego durante el primer ecuador de partido bajando a recibir y dejando algún destello de calidad, pero no le llegaron balones y no terminó de conectarse a la final. La segunda parte la arrancó variando su posición como en la primera parte con Vinicius. Fue en la banda izquierda, donde más habituados estamos a ver a Mbappé, cuando más cómodo se notó sobre el verde. Arrancando desde el flanco izquierdo, Kylian encaró la defensa rival y buscó con mayor peligro el área. 67 minutos necesitó Kylian Mbappé para hacer su primer gol con la camiseta del Real Madrid. El galo recibió de Bellingham, amagó al rival y clavó un disparo a la mismísima escuadra. El de Bondy corrió hacia la banda e hizo su celebración clásica. Los futbolistas del conjunto blanco acudieron a felicitarle y a festejarlo junto a él. Siguió buscando el balón, teniendo protagonismo y queriendo estar presente en cada acción, hasta que fue sustituido por Carlo Ancelotti en el minuto 82 para dar entrada a Brahim Díaz. Kylian Mbappé logró firmar un debut de ensueño, haciendo su primer gol con la camiseta del Real Madrid, ganando la Supercopa de Europa y alzándose con su primer título internacional a nivel de clubes. La afición del Real Madrid tiene motivos viendo este encuentro de poder soñar con ver triunfar a un nuevo galáctico en el Santiago Bernabéu.