Sanidad aclara que la viruela del mono no se comporta de modo distinto después de que Suecia o Pakistán hayan confirmado nuevos casos

El Ministerio de Sanidad ha publicado este viernes un mensaje apelando a la calma después de que la Organización Mundial de Salud haya establecido una emergencia mundial por el auge de casos de viruela del mono, y también después de que se hayan anunciado los primeros casos, algunos con una nueva variante, tanto en Suecia como en Pakistán.

El Gobierno subraya que estos anuncios no implican que la nueva variante no estuviera ya previamente en circulación, pero añade que en el caso de España no se ha detectado que los casos localizados durante este 2024 se hayan comportado con más gravedad o distintos síntomas con relación a los que ya se vienen diagnosticando desde 2022. En España el aumento de casos no es significativo: 264 en lo que va de año, hasta el pasado 8 de agosto, última actualización del centro nacional de epidemiología. Cifras que quedan lejos de los 7500 de 2022 y por debajo todavía de los 319 del año pasado, aunque es posible que se supere la cifra.

Recuerda además que el lunes se va a celebrar una reunión en el marco de la Unión Europea para evaluar la situación actual y ajustar si fuera necesario la respuesta de España frente al virus. En todo caso, la ministra de Ciencia, Diana Morant, ha insistido en que su recomendación "ante cualquier virus y cualquier amenaza es vacunarse".

Además de Suecia, también Pakistán ha confirmado nuevos casos esta mañana. En este caso se investiga si los pacientes presentan o no la nueva variante de la viruela del mono. Las autoridades pakistaníes han confirmado además que varias de las personas que presentan síntomas proceden de Emiratos Árabes Unidos.

Este mismo viernes, el secretario general de la Organización Mundial de la Salud ha pedido en X a todos los países que preparen sus mecanismos de vigilancia y que compartan los datos de que dispongan para poder hacer frente a una posible expansión de las infecciones.

Aumenta la alerta en Europa

El Centro de Control de Enfermedades europeo ha incrementado el nivel de alerta sanitaria por este virus, por lo que pasa de "bajo" a "moderado" y pide a los países del continente que vigilen la llegada de viajeros procedentes de áreas afectadas. Este organismo en todo caso llama a la calma porque recuerda que el nivel de transmisión en Europa es muy bajo y que los casos que puedan importarse de otros países pueden ser rápidamente detectados y tratados.

Sí admite el Centro que es probable que se detecten más casos de la nueva variante que procede de África, sobre la que también hace un llamamiento a la calma y cree que una buena labor de prevención mantendrá seguros a los países europeos.

Vigilancia reforzada en China

Al hilo del aviso de la OMS y los casos anunciados en Suecia y Pakistán, distintos países han anunciado ya un refuerzo de sus protocolos de vigilancia, sobre todo en los aeropuertos. Es el caso de China, que realizará pruebas concretas a quienes procedan de países donde se hayan confirmado nuevos casos de la viruela del mono para comprobar si tienen síntomas como fiebre o erupciones cutáneas. Este país también realizará inspecciones sanitarias a vehículos, contenedores o mercancías procedentes de dichos lugares.

También el gobierno de Nicaragua pone un marcha un protocolo específico de vigilancia. La vicepresidenta del país, Rosario Murillo, ha explicado que "no se puede descartar que la nueva variante llegue a las Américas, por lo que tenemos que estar alerta".

En el ámbito de las empresas privadas, la farmacéutica danesa Bavarian Nordic, que fabrica vacunas para hacer frente a esta enfermedad, ha pedido hoy a la Agencia Europea de Medicamentos que extienda la aprobación del uso de dichas vacunas en adolescentes. Actualmente el uso de la vacuna está aprobado sólo para mayores de 18 años, aunque en Estados Unidos ya hay permiso para administrarla a personas de entre 12 y 17 años en caso de emergencia mundial.

La empresa danesa está investigando el posible uso de la vacuna en niños a partir de los 2 años después de comprobar que los menores son los más afectados en los últimos meses en la República Democrática del Congo, epicentro de la expansión del virus.