La enésima suspensión en Cincinnati obliga a parar la semifinal de Badosa y evidencia la necesidad de techar las pistas de tenis
La semifinal entre Badosa y Pegula fue suspendida de manera indefinida por la lluvia y retrasa el calendario del Masters de Cincinnati
Paula Badosa, en la semifinal del Masters de Cincinnati ante Pegula / Captura de Twitter
Ha vuelto a pasar. La lluvia ha hecho acto de presencia en el Masters de Cincinnati, obligando a parar la semifinal entre Badosa y Pegula en el segundo set. La final, que ya está retrasada para el domingo, puede demorarse aún más, viendo que aún no se ha resuelto este partido. Lo que esto deja en evidencia es que un Masters 1000 del calibre de Cincinnati no puede continuar con una pista sin techar porque la lluvia no hace más que atrasar todos los partidos en un tiempo tan inestable como el de Cincinnati en esta época del año.
La tenista española, después de una mala racha en su carrera, viene mejorando su juego en las últimas semanas y acumula buenos torneos, como el de Washington en el que se proclamó campeona y este Masters 1000 de Cincinnati en el que, de momento, ha alcanzado unas semifinales con las que confirma el buen momento que atraviesa.
Un primer set en el que no se vio a Badosa
El primer set lo solucionó Pegula rápidamente, se puso con dos breaks en los dos primeros saques de la española: cuatro a cero en apenas unos minutos. Quiso reaccionar la española que mantuvo su siguiente saque y consiguió romper el de la jugadora local para poner el 4-2. Sin embargo, no pudo alargar más el set la tenista catalana y lo cerró la estadounidense sin demasiados problemas con dos juegos en blanco, uno al resto y el otro al servicio.
La segunda manga, más igualada
El segundo set empezó con la misma dinámica, Pegula se anotó los dos primeros juegos, pero Badosa, esta vez sí, consiguió meterse en el partido con tres juegos consecutivos. Sirvió para ponerse por delante por primera vez en todo el encuentro, 3-2 y con esperanzas de llevar el partido al tercer set. Sin embargo, cuando mejor estaba la española, con 4-3 a favor, se detuvo el partido porque empezaron a caer las gotas de lluvia sobre la pista. Esto se retrasó durante varios minutos y la organización suspendió el encuentro de manera indefinida.