Internacional

El Banco Central de Libia suspende sus operaciones tras el secuestro de un alto funcionario

Afirman que seguirán cerrados hasta que liberen a su jefe de tecnología informática

Imagen de las banderas de Libia / Anadolu Agency

Madrid

El Banco Central de Libia ha anunciado que cierra sus instalaciones y frena todas las operaciones hasta que el alto funcionario del banco secuestrado este domingo, sea liberado.

En un comunicado, el banco con sede en Trípoli, denunció que Musab Msallem, jefe de tecnología informática, fue secuestrado en su casa por un grupo de personas no identificadas. Aseguraron además que otros trabajadores también fueron amenazados, algo que la entidad ha dicho, rechaza totalmente y no reanudarán las operaciones hasta que "cesen estas prácticas mafiosas y las autoridades competentes intervengan".

Este secuestro ocurre una semana después de que un grupo armado asediara el banco, en un intento de forzar la dimisión de Seddik al-Kabir, gobernador del banco, según informaron medios locales.

Richard Norland, embajador de Estados Unidos en Libia, dijo la semana pasada en la red social X, que los intentos de reemplazo de la dirección eran "inaceptables" y que podrían resultar en la perdida de acceso a los mercados financieros internacionales. Este banco es el único reconocido mundialmente de los ingresos de petróleo del país.

Tras el derrocamiento apoyado por la OTAN del dictador Muammar Gadafi en 2011, Libia ha disfrutado de muy poca paz. En 2014 el país se dividió en dos facciones del este y el oeste, cada una apoyada por milicias armadas. Hace unos días, el 14 de agosto, se produjeron los peores enfrentamientos en un año entre la Brigada 444 y la Fuerza Especial de Disuasión, dos de las milicias más grandes de Trípoli que compiten por el poder y que dejaron más de 55 muertos. El 9 de agosto también murieron nueve personas en otros enfrentamientos entre dos facciones armadas en la ciudad de Tajura, algo que el Norland volvió a denunciar.

El Gobierno de Unidad Nacional de Libia está encabezado por el primer ministro Abdulhamid al-Dbeibah desde 2021, en un proceso respaldado por la ONU y reconocido internacionalmente. Sin embargo, el este del país está bajo control del comandante militar Khalifa Haftar.

Un país con grandes riquezas naturales, fragmentado en dos gobiernos y con conflictos que no terminan.