"El Madrid no puede ser el PSG": el proyecto blanco choca contra la realidad de LaLiga en su debut

El Real Madrid no ha empezado de la mejor manera posible su andadura en LaLiga. Lo que parecía que iba a ser un paseo, debido a la gran cantidad de estrellas con las que cuentan en su plantilla, ya no lo es tanto con el primer pinchazo que han sufrido en Mallorca. El conjunto blanco se adelantaba en el marcador con un gol tempranero de Rodrygo en el minuto 13. Sin embargo, al poco de empezar la segunda parte Vedat Muriqi empataba el marcador, y ya no fueron capaces ninguno de los dos equipos de poder anotar el tanto del desempate. Aunque el partido sí que nos dejó ciertas imágenes polémicas como la expulsión de Ferland Mendy en los últimos instantes.

Santi Giménez en El Sanedrín, fue muy claro sobre esta situación y dice que el "Madrid no puede ser el PSG, que daba la liga por descontada". En los últimos años, el equipo parisino ha dominado con mucha claridad su competición doméstica, a excepción de un par de años en los que se le escapó la liga. Sin embargo, año tras año muestra su superioridad arrolladora ante los demás equipos de Francia. La temporada pasada sin ir más lejos, se la llevó con nueve puntos de ventaja.

Sin embargo para Giménez "el Madrid debe estar enchufado siempre". Esto se debe a la diferencia de nivel que existe entre España y Francia, y es que como dice Álvaro Benito "si el Real Madrid aparece andando los 20 primeros minutos de la segunda parte en otros partidos, va a pasar por bastantes más problemas que el PSG en la liga francesa, porque por suerte la liga española es mejor". Además critica la gran cantidad de elogios que está recibiendo la plantilla blanca, ya que según él, "el elogio debilita y la crítica fortaleza", encima habla de como van a encontrarse equipos que contra ellos "van a hacer el partido de sus vidas".

"Es una genialidad de gestión de vestuarios"

También hablaron de la nueva medida de que va a adoptar el Real Madrid en cuanto al tema de los descansos. Para Santi Giménez "es una genialidad de gestión de vestuarios", decía en El Sanedrín, aunque él no cree que sea para que los jugadores tengan más días libres: "Es una manera de evitarse los cambios en el minuto 87. Es aquello de decir te doy Bellingham una semana de vacaciones y entonces juega Güler, a Vinicius descansa y entonces ya jugará Mbappé por la izquierda y no tengo que elegir".