Internacional

Al menos cuatro muertos y millones de evacuados por el tifón Shanshan en Japón

Después de arrasar la isla de Kyushu, se espera avance hacia la región occidental de Japón

Los servicios de la localidad están trabajando para limpiar la zona, tras el paso del tifón Shanshan / FRANCK ROBICHON (EFE)

Madrid

En la que es una de las peores crisis de los últimos años en Japón, el tifón "Shanshan" tocó tierra este jueves en el país, dejando fuertes lluvias, al menos cuatro muertos y más de 90 heridos. Hay varias personas desaparecidas, por lo que no descartan que aumente el número de fallecidos.

Se han tenido que suspender también los vuelos y servicios de tren bala, por las rachas de viento de hasta 250km/h. La tormenta ha arrasado la isla de Kyushu, en el suroeste de Japón, donde viven 12,5 millones de personas. De hecho, casi 4 millones de personas han tenido que evacuar sus casas al sur del país, tras los fuertes vientos y lluvias torrenciales que han dejado a más de 250.000 casas sin electricidad y que ha causado desplazamientos de tierra.

Los negocios han tenido que cerrar y las estaciones como la de Kokura, una de las más importantes de la ciudad de Kitakyushu, al norte de Kyushu, han suspendido todos los servicios.

La línea ferroviaria Tokio-Hiroshima tuvo que cerrarse a mitad de trayecto, y varios pasajeros quedaron varados en el tren durante casi 13 horas hasta que pudo regresar a Tokio.

Se espera que atraviese Kyushu este viernes antes de continuar hacia el este, hacia la región occidental de Japón, ampliándose todavía más la zona de impacto del tifón en los próximos dos días. De hecho, cientos de personas han tenido que evacuar en Tokio ante la proximidad de Shanshan.

La tormenta estalló en el océano Pacífico la semana pasada y se fue desplazando hacia Japón el fin de semana, fortaleciéndose cada día hasta convertirse en tifón el lunes por la noche con vientos superiores a 156 km/h.

Aunque se prevé que pierda fuerza, la agencia meteorológica japonesa ha informado que aún existe el peligro de lluvias torrenciales, fuertes vientos u olas altas, aunque el tifón se convierta en un ciclón tropical; por lo que piden precaución a la población.