Un proyecto para comprender y compartir

Madrid

El documento de prospectiva España 2050 elaborado por un equipo dirigido por el nuevo jefe del gabinete del presidente, el joven historiador Diego Rubio, comienza con una frase de Séneca: Ningún viento será bueno para quien no sabe a qué puerto se encamina. Es toda una declaración política porque en política es muy importante tener un proyecto, un plan de conjunto que presentar a los ciudadanos y que estos puedan comprender y compartir.

Eso es precisamente lo que más se ha reprochado al presidente Sánchez, la dificultad para entender cual es su proyecto político global. En su comparecencia pública de hoy, el presidente se ha esforzado en fijar algunas líneas políticas y se ha mostrado optimista sobre el futuro de España, satisfecho de las proyecciones económicas y dispuesto a acentuar las políticas sociales, especialmente las que aumenten el número de viviendas accesibles a ciudadanos de renta escasa. De lo que no ha dicho nada es del pacto firmado entre los socialistas y Esquerra republicana de Catalunya, el tema mas candente. Solo que con su nuevo sistema de financiación autonómica todas y cada una de las comunidades recibirán más dinero del que reciben ahora. No es precisar mucho.

Sigue faltando concreción y un plan global que los ciudadanos puedan entender y compartir. El documento 2050 no hablaba para nada de una reforma del sistema autonómico, pero el epilogo se titulaba: Redescubrir el optimismo.