Todo sigue como antes de irnos

Madrid

No ha sido este un verano tranquilo informativamente hablando, que se lo pregunten a Sastre. Pero desde que el lunes la vida volvió mayoritariamente a la rutina, la política se puso también a circular por los carriles de la normalidad. Y entiéndase normalidad por carrusel de declaraciones y más declaraciones y comparecencias varias. Entre ellas, las del propio presidente del Gobierno, dos veces, que arrancó así ya oficialmente el curso.

La financiación autonómica, con esa financiación singular para Cataluña en el centro del debate; el nombramiento del ministro José Luis Escrivá como nuevo gobernador del Banco de España y la obligada remodelación del Gobierno por este nombramiento fueron los ejes sobre los que pivotó el día. Así que Sánchez prometió más recursos para todas las comunidades con una frase que ya queda para la posteridad, "más transporte público y menos Lamborghini".

El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, defendió en su comparecencia el nombramiento de Escrivá. Es la persona idónea, dijo, aunque chirríe que pase de la mesa del Consejo de Ministros al Banco de España sin, ni siquiera, unos días libres. Y en el turno de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, seguimos sin aclarar en qué consiste exactamente eso de la financiación singular para Cataluña. Mira que era una buena oportunidad para conocer los detalles para entender de que habla el Gobierno cuando habla de este modelo de financiación, pero la pedagogía que el Ejecutivo quiere empezar a hacer, de momento, se ha quedado corta.

Y por acabar de rematar la vuelta a la rutina, al otro lado el PP, con el que sigue el 'no a todo', pero sin ninguna propuesta concreta en nada, crítica y más crítica a la acción del gobierno, recuperando incluso un término que ya habíamos oído, pero en boca del líder de un partido que ya desapareció, ayer el PP llamó banda al gobierno, "una banda peligrosa", dijo el senador Jaime de Olano, "la banda de Sánchez".

Así que cuando acabó el día ya no había ninguna duda de que la vuelta a la normalidad era total, todo sigue como antes de irnos, en nada se nos habrán olvidado las vacaciones.

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