Un magnate entra en cólera al enterarse de quién es el comprador de su mansión tras aceptar una rebaja de 6 millones de dólares
El fundador de Tectoy, Leo Kryss, vendía su propiedad de siete habitaciones por 85 millones de euros antes de acceder al descuento
Imagen aérea de una propiedad de lujo en la isla de Indian Creek, en Miami. / felixmizioznikov
Leo Kryss, el cofundador de la compañía brasileña de juguetes y electrónica Tectoy, ha demandado al agente inmobiliario que se ocupó de la venta de su mansión en el complejo de la isla Indian Creek de Miami. La propiedad es vecina de una casa de tres dormitorios por valor de 68 millones de dólares que Bezos compró en junio de 2023.
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El magnate publicitaba su mansión de siete habitaciones por 85 millones de dólares. La propiedad cuenta con un cine en casa, una bodega, una biblioteca y una piscina. Cuando fue contactado por la inmobiliaria Douglas Elliman con una oferta, Kryss sospechó que el comprador pudiese ser el fundador de Amazon, que había adquirido la vivienda vecina pocos meses antes. Pero supuestamente un empleado de la inmobiliaria aseguró que el segundo hombre más rico del mundo no se encontraba detrás del intento de compra.
Supuesto engaño de la inmobiliaria
Desde Douglas Ellima, afirmaron a Kryss que la oferta final era de 79 millones de dólares, seis millones menos de lo que el empresario brasileño reclamaba por su propiedad. Kryss finalmente accedió a la rebaja de precio, pero tiempo después descubrió que el comprador era una entidad ligada a Jeff Bezos.
En una denuncia presentada ante un tribunal de Miami, Kryss afirma que conocer la participación de Bezos habría sido "muy importante para sus negociaciones y su decisión sobre el precio de venta final". Kryss está demandando a Douglas Elliman, que recibió una comisión de más de 3 millones de dólares por gestionar la venta de la propiedad.
Según el portal inmobiliario Idealista, Indian Creek, esta isla en Miami Beach, en Florida, se presenta con un formato de 'bunker' para los multimillonarios de todo el mundo. Con vecinos igual de pudientes y un sistema de seguridad extremo, los más ricos del planeta conviven en este pequeño oasis de mansiones valoradas en un precio medio de 20 millones de euros.
