Una carrera impresionante de Piastri le da el triunfo en Azerbaiyán y un accidente entre Sainz y Pérez deja al español sin puntos

El GP de Azerbaiyán será recordado en este Mundial por protagonizar una de las peleas más disputadas por la primera plaza. Oscar Piastri se llevó la victoria tras una preciosa batalla durante treinta vueltas con Charles Leclerc, que no paró de intentarlo desde que cedió su liderato al salir de boxes. En la pugna por los puestos de podio, Carlos Sainz y Sergio Pérez tuvieron un accidente al chocar ambos en la vuelta número 50 y los dos tuvieron que abandonar por irse contra el muro. Tras ello, Russell ascendió hasta la tercera posición y, por su parte, Fernando Alonso terminó sexto.

La carrera comenzó con una salida de lo más limpia, en donde los Red Bull ganaron una posición cada uno, ya que Carlos Sainz perdió su tercera plaza en detrimento de Sergio Pérez. Lando Norris, que salía muy atrás, comenzó desde muy pronto a recuperar posiciones con el claro objetivo de terminar la carrera en la zona de puntos. Por su parte, Piastri -que partió segundo- comenzó a clavar los mejores tiempos sin despegarse de un Leclerc que cada vez iba cogiendo más ritmo sobre la trazada de Bakú.

Una vez Piastri salió de la zona de DRS, el monegasco se escapó de forma definitiva en la parte más alta cuando apenas se llevaban diez vueltas del GP de Azerbaiyán. Por detrás del piloto de Ferrari, Sergio Pérez cuajó una de sus carreras más completas del Mundial y comenzó a acercarse cada vez más en busca de la segunda plaza. Destacar también que a las primeras de cambio los neumáticos comenzaron a flaquear, por lo que las paradas se produjeron entre las vueltas 10 y 20. En ese contexto, Yuki Tsunoda tuvo que abandonar por tener un agujero de grandes dimensiones en el pontón derecho.

Una defensa para el recuerdo de Piastri

La carrera rompió la monotonía tras las paradas en boxes de los pilotos y, justo después, Oscar Piastri se convirtió en el nuevo líder al adelantar a Leclerc en recta. Las preocupaciones para el monegasco fueron mayores cuando vio que Sergio Pérez estuvo muy cerca de quitarle la segunda plaza. Sainz recuperó pronto la cuarta plaza y su estrategia fue muy clara: esperar a las disputas entre Piastri, Leclerc y Pérez para aprovechar su oportunidad más tarde y pelear por el podio.

Llegados a la vuelta 30, las hostilidades entre Piastri y Leclerc fueron cada vez mayores, claramente influenciados por la presencia del DRS. Sin embargo, el piloto de McLaren se defendió a la perfección y aguantó las acometidas constantes del monegasco. Mientras, Sergio Pérez se aprovechó de esa disputa para también tener el DRS a su favor y colocarse a menos de un segundo de la cabeza de carrera. El gran beneficiado de esta disputa a tres: Carlos Sainz. El madrileño tenía muy clara su estrategia y no pudo salirle mejor, puesto que cada vez se acercaba más a los primeros.

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Las hostilidades se extendieron hasta el final de la carrera, protagonizando así uno de los duelos más bonitos de este Mundial. Carlos Sainz, que llegó a estar a nueve segundos del perseguidor, rebajó tanto su tiempo que peleó por el podio cuando faltaban más de cinco vueltas para el final. Piastri, por su parte, por fin pudo descansar porque su excelente gestión hizo que terminase el día con la tranquilidad de haberse llevado la victoria. La pelea, claramente, estaba detrás de él en la disputa por ocupar dos plazas en el podio.

En la vuelta número 50, cuando solo faltaba una y media para el final, un accidente entre Carlos Sainz y Sergio Pérez dejó con ambos abandonando la carrera. El neumático trasero del español tocó con el delantero del mexicano y los dos se fueron contra el muro. Antes, el madrileño le había adelantado, colocándose así tercero. Mientras defendía su posición para terminar en el cajón, se produjo ese accidente que terminó con Russell en la tercera plaza. Fernando Alonso, por su parte, acabó sexto.