'La aceleradora', el proyecto que reduce el tiempo de hospitalización y las secuelas de la quimioterapia en niños
La Fundación Unoentrecienmil pone en marcha la primera unidad de terapia no farmacológica para promover el ejercicio físico durante el tratamiento oncológico en niños, lo que reduce el tiempo de hospitalización y las secuelas de la quimioterapia
Deporte para recuperarse del cáncer infantil
El Hospital Universitario La Paz, en Madrid, fue el primero que incorporó el ejercicio como parte de la terapia con el fin de reducir el llamado "síndrome de encamamiento" que sufren los niños con cáncer. En su primer año ha tratado a más de 70 niños y la mejora clínica y anímica es evidente: reduce hasta un 17% el tiempo de hospitalización y los efectos de la quimioterapia y mejora la fuerza muscular y la capacidad cardiorrespiratoria. Son las ventajas que enumera Rocío Llorente, una de las fisioterapeutas que está al frente de este espacio, parecido a un gimnasio, donde los niños entrenan, juegan, se evaden y comparten experiencias, también con sus padres que pueden acompañarlos en su rutina deportiva.
"El mejor sitio del hospital"
Para Helios y Alicia es su "momento de ocio y de evasión". A los dos les diagnosticaron leucemia al mismo tiempo y con la misma edad, 12 años. Los dos hacían deporte antes de que la enfermedad alterara su vida, algo que no tuvieron que cambiar. Gracias a este proyecto pudieron adaptar y combinar la actividad física y el tratamiento médico. Los dos, que ahora son grandes amigos, coincidían en las salas de espera, en el cole del hospital y ahora quedan a través del WhatsApp de sus madres para ir juntos a la Aceleradora. "Entro con mucho ánimo y me voy satisfecho. Es mi recreo", nos dice Helios. "A veces hasta entro corriendo a la aceleradora de lo contenta que estoy y salgo siempre con una sonrisa", nos cuenta Alicia.
Proyecto digital con investigación
La Fundación Unoentrecienmil ha desarrollado una Webapp que ayuda a los terapeutas a guiar las sesiones de los pacientes oncológicos infantiles y recoge datos clave para la investigación científica. "Hay que tratar de distinta manera el cáncer en adulto que en infantil. A los niños cuando terminan el tratamiento les queda todavía una vida por delante y, a menudo, toda una vida de efectos secundarios", según el Doctor Alejandro Lucía Mulas, investigador de la Universidad Europea de Madrid.