Tenis

La prohibición de Djokovic a sus hijos que es clave en su educación: "Ahí es dónde creo que nos diferenciamos"

El tenista serbio revela muchas de sus intimidades en una entrevista en su país

Novak Djokovic juega con su hijo Stefan en la pista de Wimbledon / Mike Egerton - PA Images

Todos conocen el carácter de Novak Djokovic, tanto dentro como fuera de la pista. El serbio siempre ha bordeado la polémica: desde sus enfados cuando las cosas no le salen bien (más de una raqueta lo ha pagado) hasta su negativa a vacunarse contra el coronavirus, un hecho que le hizo no poder participar en alguno de los grandes torneos. Pero también, el 24 veces campeón de Grand Slams, ha mostrado su mejor buena con alabanzas a grandes rivales como Rafa Nadal y Carlos Alcaraz, y se ganó a todos con su lucha constante hasta conseguir el oro olímpico que se colgó este verano en París.

Lo que está claro es que, tanto para lo bueno como para lo malo, Djokovic es testarudo. Bien lo saben sus hijos Stefan y Tara. Tal y como explica el tenista serbio en la televisión de su país Blic TV, ha decidido, junto a su mujer Jelena, que sus hijos —de 10 y 7 años— no tengan teléfono móvil pese a que "se quejan" por ello. "Es el reflejo de lo que ocurre también en otros niveles. Si todos hacen algo, el rebaño se comporta igual, tienes que seguirlos. No siempre tiene que ser así. Ahí es dónde yo creo que nosotros nos diferenciamos de otros", subrayó el tenista.

Más información

En esta entrevista, Djokovic reveló muchas de sus intimidades, entre ellas por qué decidieron que sus hijos estudien en Belgrado, la capital de su país, a pesar de no haber nacido allí. "Quiero estar aquí, quiero que vayan a la escuela aquí, que sepan lo que significa este país, aunque no hayan nacido aquí", confesó Nole.

Dos decisiones que demuestran la personalidad que tiene Novak Djokovic. No es solo sobre la pista de tenis, también lo demuestra con la educación de sus hijos. Fiel a sus principios y sus valores, ha conseguido ser el mejor tenista de la historia, superando en Grand Slams a sus grandes rivales coetáneos como son Rafa Nadal y Roger Federer. Incluso, sus contrincantes más jóvenes se rinden a su tenis y a su forma de ser, como Casper Ruud, que a la hora de elegir ídolo no dudó. "Djokovic es un hueso duro de roer y sin duda merece ser considerado el mejor de todos los tiempos. No hay duda de todo lo que ha ganado", dijo en una entrevista el noruego, valorando al serbio por encima de Nadal, a quien conoce muy bien ya que se formó en su academia.

Alcaraz, rival con el que luchó por la medalla de oro en París, tampoco dudó en aplaudirle. "Ojalá me acerque a la mitad de lo que ha conseguido en su carrera", dijo en los micrófonos de la SER minutos después de perder la final olímpica contra Djokovic.