San Sebastián abre una edición con muchas estrellas, el regreso de grandes veteranos y algunas polémicas a la vista
El certamen afronta, sobre el papel, una de sus ediciones más ambiciosas con una sección oficial diversa y con los premios Donostia a Javier Bardem, Cate Blanchett y Pedro Almodóvar
San Sebastián
Admite José Luis Rebordinos, director del Festival de San Sebastián, que todos los años se plantean poner menos películas y nunca lo consiguen. "Es un objetivo que no somos capaces de cumplir, no se puede ver ni llegar a todo, hay que elegir, pero esa crítica de que hay demasiado hay que aceptarla, hay que darle la razón", dice. El único certamen español de clase A ha ido creciendo y creciendo con más secciones paralelas, con ciclos de documentales, con líneas de pensamiento y debate, hasta ofrecer una programación inabarcable. Para su 72ª edición, que arranca este viernes, ha logrado reunir a muchas estrellas, de esas que dan brillo a la alfombra roja, a unos cuantos veteranos que regresan tras años de vacío o descanso, a una buena selección de cine de otros festivales, y a tres premios Donostia muy queridos aquí y en Hollywood.
Javier Bardem será el gran protagonista de la jornada inaugural cuando recoja el galardón que reconoce su trayectoria y que no pudo recibir el año pasado por la huelga de guionistas. El actor español, con premios en Cannes, Venecia, en los Oscar, en los Goya, suma a su currículum este Donostia tan especial. Aquí presentó en los años 90 dos películas con las que empezaba a despegar su carrera, Huevos de oro -su segunda colaboración con Bigas Luna tras Jamón, jamón - y Días contados, de Imanol Uribe, con la que conquistó la Concha de Plata a mejor actor a sus 25 años. El festival también saldará la próxima semana su cuenta pendiente con Pedro Almodóvar. Y lo hará en el mejor momento, como celebración también del reciente León de Oro conquistado en Venecia que supone el primer gran premio para el cineasta manchego en un festival internacional. La primera proyección en España de 'La habitación de al lado', el debut en inglés del director junto a Julianne Moore y Tilda Swinton, es uno de lo momentos más esperados de esta edición. Días antes será una actriz, con la que precisamente Almodóvar tuvo un proyecto en común, la que recoja el otro premio Donostia. La australiana Cate Blanchett, una de las intérpretes más combativas del Hollywood actual, que viene de presentar nueva serie en Venecia con Alfonso Cuarón y aquí traerá ‘Rumours’, una sátira política del G7 que tuvo su premiere en Cannes.
Del festival francés llegan muchos de los títulos clave del cine independiente que tendrán una larga carrera de premios. Por San Sebastián pasarán Jacques Audiard y Karla Sofía Gascón para presentar ‘Emiia Pérez’, la francesa Coralie Fargeat para el estreno de ‘La sustancia’ y ‘Sean Baker’, el último ganador de la Palma de Oro, para la proyección de ‘Anora’. La sección Perlas también acogerá el estreno en España de la ‘Megalópolis’ de Francis Ford Coppola, de lo nuevo de Sorrentino y cerrará con cine español, con ‘Marco’, la película de Aitor Arregi y Jon Garaño que protagoniza Eduard Fernández como el impostor de los campos de concentración nazis.
La sección oficial se abrirá con ‘Emmanuelle’, la nueva película de la francesa Audrey Diwan tras ganar el León de Oro con ‘El acontecimiento’. Noémie Merlant protagoniza esta revisión de la famosa novela que ya ha sido adaptada en varias ocasiones al cine. “Es una película muy fría, muy cerebral, muy erótica también, pero muy política. Es una película hecha después del movimiento Me Too y fundamentalmente es la historia de una mujer que busca el placer y que reivindica a la mujer que desea. Funciona como película erótica, pero luego la película va mucho más allá”, adelanta Rebordinos de una película que tendrá aquí su estreno mundial días antes de su lanzamiento en cines de Francia y de España. En la jornada inaugural compartirá protagonismo con la primera proyección de otro de los títulos que ha genero ruido en Toronto, ‘Cónclave’, un thriller sobre la elección de un nuevo papa con Ralph Fiennes y dirigido por el alemán. Edward Berger, el autor que ganó el Oscar con ‘Sin novedad en el frente’.
Las películas en competición este año reúnen a grandes nombres. Desde Joshua Oppenheimer, el director de la perturbadora ‘The act of killing’, con un musical apocalíptico que protagonizan Tilda Swinton y George Mackey, al regreso de dos veteranos que siempre han creído en un cine político y comprometido, Costa Gavras y Mike Leigh. También forman parte de la selección el francés François Ozon, habitual de este certamen, la chilena Maite Alberdi con su primera película de ficción, o nuevos nombres del cine de autor como la portuguesa Laura Carreira, cuyo debut produce Ken Loach. “Es una sección muy variada. Luego gustará más o menos, pero realmente yo tengo la impresión que es de los años que mejor se lo va a pasar la gente”, aventura Rebordinos de una competición con terror, musicales, cine social, dramas y documentales.
Posiblemente la película más esperada del festival -al menos para la cinefilia- sea ‘Tardes de soledad’, el documental sobre la tauromaquia de Albert Serra. Un trabajo que sigue al peruano Andrés Roca Rey antes y después de la faena y que ya ha generado -sin verla- algunas críticas de asociaciones animalistas como Pacma. “No es pro toros ni en contra de los toros. La película es una aproximación artística por parte de un gran director de cine que con su última película estuvo en Cannes compitiendo, es una peli que puede interesar a gente que sea antitaurina y que sea taurina. Yo no he ido nunca a los toros y la película me interesa muchísimo”, adelanta el director del festival de la obra del cineasta catalán, una de las cuatro películas españolas en sección oficial. Las otras serán ‘Soy Nevenka’, la mirada de Iciar Bollaín al acoso sexual de aquella concejala de Ponferrada, Los destellos’, la tercera película de Pilar Palomero, y ‘El llanto’, la ópera prima de Pedro Martín Calero con guion de Isa Peña -la escritora habitual de Sorogoyen- y con Ester Expósito del protagonista.
El cine español tiene presencia en sección oficial y también en varias secciones paralelas del festival -por ejemplo, con Sandra Romero, C. Tangana y David Pérez Sañudo en Nuevos directores-, pero también el propio certamen asume que no puede ser el único escaparate de la temporada de otoño para nuestra cinematografía. “Cada vez es más difícil porque hay más cantidad y más calidad, pero las películas se tienen que dividir. Tenemos que huir del festival supermercado, San Sebastián no puede tener todo el cine español, tiene que tener una representación muy grande, pero luego también vienen Valladolid, Sitges, Sevilla,Gijón”, responde Rebordinos que, además de películas, ha programado tres series en sección oficial fuera de concurso. Alauda Ruiz de Azúa, la autora de ‘Cinco lobitos’, presenta ‘Querer’, una miniserie sobre agresiones sexuales dentro del matrimonio que protagoniza Nagore Aramburu. Javier Giner estrenará la adaptación de su libro ‘Yo, adicto’ y Diego San José convierte a Carmen Machi en inspectora de Hacienda persiguiendo a una cantante latina en ‘Celeste’.
Tras una edición de Venecia con muchas películas sobre la extrema derecha, el auge del fascismo y la violencia, la reflexión política también se espera en San Sebastián con un cine que habla de su tiempo y la sociedad en la que vivimos. “Somos un festival que recibimos bien a todo el mundo, desde la gente más conservadora hasta la más progresista. Pero también hemos dicho con claridad que siempre vamos a estar contra el fascismo. No somos un festival que defiende a partidos, pero defendemos derechos humanos. No hacemos la selección pensando que sea más político o menos político. Lo que pasa es que el cine tiene una parte de divertimento y hay películas que son puro disfrute, pero también es reflejo de la sociedad, de su tiempo. Yo creo que ahora hay temas como la situación de la mujer, como la pobreza, las desigualdades sociales y el auge del fascismo en todo el mundo que preocupan. Entonces los cineastas hablan de eso. Yo creo que va a haber una línea de cine político de tipo social, como hay otras películas que son puro divertimento o puro género”, concluye el director del Festival de San Sebastián.