La carrera por liderar Esquerra Republicana de Catalunya ha dado su pistoletazo de salida este sábado. Uno de los candidatos, Oriol Junqueras, a presentado su candidatura de forma efervescente ante un recinto lleno hasta la bandera en Olesa de Montserrat (Barcelona), donde se han dado cita más de 1.500 militantes del partido, a pesar de los malos resultados del partido en las recientes citas electorales. Militància Decidim es como se denomina la opción encabezada por el exvicepresidente de la Generalitat. Junqueras se ha certificado como serio aspirante a liderar el partido ante los reclamos y gritos de «presidente». En el acto, el que aspira ser el líder del partido republicano, ha presentado su propuesta, en la que Elisenda Alamany ha sido la elegida para ejercer como secretaria general si su lista congrega los apoyos necesarios en el congreso extraordinario del partido que se celebra el próximo 30 de noviembre y cuyo objetivo es elegir a la nueva dirección. En la intervención, Oriol Junqueras se ha comprometido a «salvar y rescatar» a la formación republicana para volver a ponerla «al servicio de la sociedad», tras la que considera «vergüenza» sentida por la existencia de «órganos paralelos». Este último detalle ha sido el primer ataque que ha lanzado, pero no el único. La intervención de Junqueras de este sábado ha postulado al expresidente como firme candidato y, a su candidatura, como la que cuenta con el apoyo mayoritario de la militancia. Enfrente, Militància Decidim se encontrará tres otras listas de las que se espera que únicamente la denominada coo rovisista y encabezada por la actual secretaria general de ERC, Marta Rovira, alcance los avales necesarios. La candidatura de Rovira propone como cabeza visible al exalcalde de Vilassar de Dalt (Barcelona) Xavier Godàs. También el exdiputado y consejero de la Generalitat Alfred Bosch y el colectivo Primer dOctubre han hecho oficial su intención de acudir como candidatos a la próxima cita extraordinaria del partido. En el acto de este fin de semana en el que se presentaba la candidatura, Junqueras ha aprovechado para cargar contra su mayor amenaza al frente de la formación. Junqueras ha acusado a Rovira, aunque sin referirse directamente a la actual secretaria general, de «traicionar los principios» y de haberles hecho «pasar vergüenza», en alusión a los carteles denigratorios que vinculaba a los hermanos Maragall con el Alzheimer y que salieron de las filas del propio partido. Las discrepancias en la formación republicana aparecieron después de que los malos resultados en las últimas citas electorales dejasen una formación mermada y poco cohesionada. Estas disonancias son más que palpables en cada uno de los actos públicos que protagonizan tanto Junqueras como Rovira. Este mismo viernes, líder de los rovisristas aprovechó durante su intervención onsell Nacional del partido para pedir que el congreso de noviembre sea un punto de reestructuración no solo de liderazgos, sino también de «maneras de funcionar». «Hace falta también que nos repensemos ante los errores garrafales, los fallos éticos y morales que ha hecho nuestra organización y ante protocolos y procesos internos que no han acabado de colocarnos, aún a día de hoy, en el lugar donde deberíamos estar como ERC», exigió Rovira.