El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha asegurado ante la Asamblea General de la ONU que el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, debería ser detenido como lo fue Adolf Hitler hace 70 años. «Netanyahu y su banda de criminales también deben ser detenidos por la alianza de la humanidad», ha insistido el presidente turco. Erdogan ha añadido que los valores del sistema de las Naciones Unidas y del mundo occidental están muriendo en Gaza mientras continúa el conflicto allí, y ha pedido una «alianza de la humanidad» para detener a Israel. En un discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, Erdogan también ha recordado que Turquía está con el pueblo del Líbano mientras Israel ataca allí a los combatientes de Hezbolá con ataques aéreos. Una situación que estalló la semana pasada y que ya deja casi 600 fallecidos, entre ellos, al menos 50 menores de edad. El presidente turco ha remarcado que la administración israelí ignora los derechos humanos básicos y que será necesaria una alianza de la humanidad para poder parar la actividad de Israel. Erdogan ha hecho estas afirmaciones poco después del último discurso del presidente de EEUU, Joe Biden, quien también se ha referido a este conflicto durante su intervención. Biden ha alertado de los peligros de una posible «guerra a gran escala» entre Israel y Líbano y ha insistido en la necesidad de una solución diplomática. En este contexto, Biden también ha urgido a Israel y Hamás a llegar a un acuerdo para lograr un alto el fuego en la Franja de Gaza y también hacer posible la liberación de los rehenes israelíes a cambio de prisioneros palestinos, además de facilitar la entrada de ayuda humanitaria. «Ahora es el momento para que las partes finalicen los términos, devuelvan a los rehenes y garanticen la seguridad de Israel y Gaza, alivien el sufrimiento en Gaza y pongan fin a esta guerra», ha afirmado Biden ante la Asamblea General de la ONU, en el que supone su último discurso ante este órgano como presidente de EEUU. Además, ha añadido que los rehenes y civiles en Gaza están viviendo «un infierno» y que «la guerra debe acabar ahora». Sobre la situación en el Líbano, ha apelado a que todavía es posible una solución diplomática en el conflicto entre el Líbano e Israel, que de momento ya deja casi 600 muertos libaneses, entre ellos, unos 50 menores de edad, además de cientos de heridos. «Una guerra a gran escala no beneficia a nadie. Aunque la situación se ha agravado, aún es posible una solución diplomática», ha manifestado.