El primer ministro libanés viaja por sorpresa a Nueva York para denunciar en la ONU los ataques de Israel

El primer ministro de Líbano, Najib Mikati, ha decidido acudir finalmente a la Asamblea General de la ONU en Nueva York, donde no estaba prevista su asistencia, para intervenir allí después de los ataques de Israel que han dejado ya cerca de medio millar de muertos. En la semana de inicio de la actividad anual de Naciones Unidas en la que intervienen los dirigentes de todos los países, Líbano tomará la palabra el lunes, tres días después de que haya hablado allí el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu. Según un comunicado del gobierno libanés, Mikati busca realizar «más contactos» en Nueva York, donde por ejemplo el presidente palestino Mahmud Abbás o el de Ucrania, Volodímir Zelenski, están ya convocando múltiples reuniones bilaterales para intentar aunar respaldo internacional a su resistencia frente a Israel y a Rusia respectivamente. La ofensiva de Israel en Líbano va a convertirse por tanto en uno de los temas centrales del debate general en el seno de Naciones Unidas al tiempo que distintas agencias de la ONU, desde ACNUR a UNICEF, hablan de una «preocupación extrema» por el aumento de la violencia y la muerte de civiles en las últimas horas. Tanto distintas agencias de la ONU como organizaciones humanitarias como Save the Children han pedido a las partes que se aseguren de que los civiles no sufren daño. A pesar de que Israel asegura que sus ataques no tienen como objetivo infraestructuras civiles, el ministerio de Salud de Líbano ha confirmado al menos la muerte de 50 niños y niñas por los bombardeos. Las agencias de la ONU han comparecido de forma conjunta en Ginebra para describir la situación en Líbano. Allí por ejemplo la representante de ACNUR, Ravina Shamdasani, ha narrado que un trabajador de la organización «perdió ayer mismo a siete miembros de su familia, incluidos dos niños» por los ataques del ejército hebreo. Shamsadani ha hablado del día «más violento en Líbano en años» en referencia a los ataques de Israel este lunes y ha exigido a Tel Aviv que «debe distinguir entre población civil y combatientes, entre objetivos civiles y militares. La ley internacional humanitaria es muy clara». La oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas recuerda además a Israel que «enviar mensajes de aviso a los libaneses no es excusa para atacar civiles». Ettie Higgins, de UNICEF, ha recordado además el sufrimiento por el que ha pasado Líbano en los últimos años: «Ha quedado devastado por unas crisis políticas y económicas prolongadas, por la gran explosión en el puerto de Beirut, por el impacto del COVID y por cinco años seguidos de empeoramiento económico que han disparado la pobreza. Muchas familias ya están al borde del abismo». En el caso de Save the Children, esta organización alerta de que más de 345.000 niños y niñas corren peligro, de que las escuelas ya están cerradas desde este martes, lo que afecta a millón y medio de estudiantes, y que muchos presentan ya síntomas de terror al escuchar por ejemplo el vuelo de los aviones. En paralelo a la crisis humanitaria en ciernes y al éxodo de miles de libaneses desde el sur al norte del país, durante la mañana de este martes se han cancelado ya decenas de vuelos en el aeropuerto de Beirut. Aerolíneas como Qatar Airways o Etihad han anunciado la suspensión temporal de sus vuelos con destino u origen en la capital libanesa. El portavoz de Defensa de la Casa Blanca, John Kirby, ha pedido además a los estadounidenses que estén en Líbano que cojan los vuelos comerciales que estén disponibles para salir de allí cuanto antes. La mayor parte de la comunidad internacional desaconseja viajar a Líbano, aviso que en el caso de España está vigente ya desde principios de agosto. En la web del Ministerio de Exteriores las recomendaciones de viaje a ese país recalcan que «en la situación actual se desaconseja el viaje bajo cualquier circunstancia al Líbano y se recomienda a los españoles que se encuentren en el país, especialmente si su estancia es temporal, que lo abandonen utilizando los medios comerciales existentes».

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Según el gobierno de Líbano, al menos 50 niños han muerto por los bombardeos de Israel sobre el sur de Líbano y UNICEF alerta de que más han quedado sepultados bajo los escombros

Antonio Martín

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