Escrivá promete imparcialidad y propone revisar la ley para reforzar la independencia del Banco de España

Madrid

El nuevo gobernador del Banco de España quiere aumentar la independencia y la transparencia de la institución. Es el principal mensaje que ha lanzado José Luis Escrivá durante su toma de posesión como máximo responsable de la institución a la que ha llegado directamente desde el ministerio de Transformación Digital, algo que ha sido duramente criticado por el Partido Popular y que también ha levantado críticas de los socios parlamentarios del Gobierno.

Escrivá ha defendido en su toma de posesión la necesidad de actualizar la ley de autonomía del Banco de España para "reforzar todavía más su independencia". Y para ello, la comisión ejecutiva ha creado un grupo de trabajo que tendrá que proponer en un plazo corto de tiempo propuestas para actualizar una ley que lleva treinta años en vigor. La idea es que "el refuerzo de la independencia, por un lado, y la transparencia y la rendición de cuentas, por otro, vayan de la mano", según ha explicado Escrivá. El grupo de trabajo lo liderará la consejera Lucía Rodríguez, después de que Fernando Fernández, el único consejero a propuesta del PP, haya renunciado al puesto pese a que hace unos días lo había aceptado.

Además de la independencia, el nuevo gobernador ha insistido en la necesidad de abrir más la institución para hacerla más cercana a los ciudadanos: "debemos esforzarnos por acercar nuestro trabajo a los ciudadanos y también nuestro inmenso patrimonio histórico y cultural", ha dicho en un discurso en el que ha pedido a los trabajadores del Banco "humildad para reconocer nuestras limitaciones y aprender de nuestros errores".

Escrivá toma el testigo de Pablo Hernández de Cos que se ha despedido hoy tras seis años como gobernador sintiéndose "sinceramente orgulloso de lo que hemos logrado" y que ha defendido su legado diciendo que si se "construye sobre la base de lo ya logrado y manteniendo el rigor y la independencia, el éxito está garantizado".