David Otero se sincera sobre su carrera en solitario: "Me decían: es un fracaso porque no tienes popularidad, fama ni dinero"

Madrid

Hace más de una década desde que la banda que marcó generaciones tomase la decisión de separar sus caminos. El Canto del Loco se separó en 2010 pero canciones como Zapatillas o Besos aún persisten en la memoria de los fans. Desde que el grupo echase el cierre, sus integrantes tomaron senderos diferentes. Entre ellos, David Otero y Dani Martín, que mantienen una relación familiar, pues son primos, además de la que mantenían profesionalmente, comenzaron su andadura en la música en solitario. David Otero, estrena ahora su sexto disco desde que se desprendiese del grupo y, en una entrevista con El País, ha desvelado cómo afrontó los comentarios de los fans que tildaban de "fracaso" su carrera en comparación con la fama que estaba recopilando su primo.

El punto y final del grupo se produjo en un momento en el que las relaciones internas no eran precisamente positivas. "Ya no éramos felices en la banda", ha confesado el músico. Aunque, admite que en El Canto del Loco fue "muy feliz". Sobre la situación de malestar conjunta en el grupo, el cantante asegura que fue la "maquinaria que había por detrás", la que rompió el "sentido personal de hacer las cosas por amor al arte, por compartir, por conectar con la gente de verdad". Cabe recordar que, el último mánager que trabajó con la banda fue condenado a prisión por apropiación indebida, por lo que todo apunta a que, esa "maquinaria que había por detrás", a la que Otero se refiere, es precisamente el exmánager de El Canto del Loco.

En cuanto a su decisión en el momento de ruptura, Otero asegura que priorizó su "salud mental" y no esconde que no se arrepiente de haber iniciado una carrera en solitario porque ahora, dice, es "infinitamente más feliz". No esconde tampoco en su conversación que no tiene la misma capacidad que antes de "hacer cosas" y que cuenta "con mucho menos presupuestos, con mucho menos márketing, con mucho menos de todo".

"Me decían: esto es un fracaso"

Sus inicios separado de grupo no fueron fáciles y en seguida comenzaron a aparecer críticas de los fans que comparaban la fama de su primo Dani Martín con la suya. Otero volvió a salas íntimas, de capacidad reducida, mientras que Martín era capaz de llenar una y otra vez recintos de inmensas dimensiones como el Wizink Center de Madrid. Los seguidores menospreciaban la labor de Otero y, según confiesa, calificaban su carrera de "fracaso."

"Pero, tío, esto es un fracaso, porque ya no tienes popularidad, fama ni dinero", revela que llegaba a escuchar de los fans. En este sentido, asegura que ese éxito y crecimiento, era "inversamente proporcional" a su "crecimiento personal".

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La fama fue el desencadenante de los malentendidos y, según se extrae de su conversación, es algo de lo que trata de huir. El éxito del grupo ina en constante aumento pero "todo empezó a crecer tanto se distorsionaron mucho las realidades y cada uno veía las cosas de una manera muy diferente", admite. Fue cuando decidió separarse de la fama y popularidad de El Canto del Loco, cuando fue consciente de la realidad. Cuenta que cuando conectó "con personas que lo están pasando mal, que tienen hambre, que tienen frío, que no tienen casa", se dio cuenta de que "la realidad del mundo no es España". "Si te crees que eres tan importante en la vida de la gente tienes un problema gigante, porque estás fuera de la realidad", proclama como autoaprendizaje.