El Ejército de Israel ha anunciado este sábado que el jefe del grupo libanés Hezbolá, Hasan Nasrallah, ha sido asesinado en el bombardeo israelí de este viernes contra la sede central del movimiento en los suburbios sur de Beirut, tan solo minutos después de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, compareciese ante la ONU.«Hasán Nasrallah está muerto», ha adelantado este sábado en X el portavoz castrense para la prensa internacional, Nadav Shoshani, tras una noche de especulaciones después de que el líder chií no diera señales de vida. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han asegurado que «ya no podrá aterrorizar al mundo». En un comunicado castrense más detallado, el Ejército ha confirmado la muerte de Nasrallah junto a otros comandantes de Hezbolá, entre ellos, Ali Karki, comandante del Frente Sur del grupo chií, que se encontraban en el cuartel general subterráneo de la organización, en los suburbios sur en Beirut conocidos como el Dahye, cuando fue bombardeado. «El ataque se llevó a cabo mientras la cadena de mando superior de Hezbolá operaba desde el cuartel general y promovía actividades terroristas contra los ciudadanos del Estado de Israel», ha asegurado el texto, sin aportar pruebas. Asimismo, el grupo libanés Hezbolá ha confirmado oficialmente que su líder Hassan Nasrallah ha sido asesinado y ha prometido continuar la batalla contra Israel. Y el presidente de Palestina, Mahmud Abbas, ha mostrado sus condolencias tras la muerte del jefe de Hezbolá. También se ha pronunciado el primer ministro libanés, Najib Mikati, condenando el asesinato y pidiendo «unidad» para hacer frente a la «guerra genocida» contra el Líbano. «Nuestra solidaridad hoy, en estos momentos cruciales de la vida de la nación, es la respuesta más fuerte a la agresión israelí», ha asegurado en un discurso durante una sesión del Consejo de Ministros, celebrada de emergencia tras el regreso anticipado de Mikati de Nueva York, donde acudió a la Asamblea General de Naciones Unidas. Las Fuerzas Armadas israelíes han informado este sábado de la muerte de Hasán Jalil Yasín, considerado por Tel Aviv como responsable de decidir los objetivos de los ataques de Hezbolá contra suelo israelí. Yasín ha muerto a mediodía en un bombardeo en el barrio de Dahiya de Beirut. «Aviones de combate de la Fuerza Aérea bajo la dirección del ala de inteligencia atacaron y mataron al terrorista Hasán Jalil Yasín», ha indicado el Ejército israelí en un comunicado. Yasín era «jefe del departamento» del cuartel general de inteligencia de Hezbolá que designaba los objetivos «militares y civiles» de los ataques con proyectiles de Hezbolá tanto cerca de la frontera entre Líbano e Israel como en territorio israelí alejado de la frontera. El portavoz del Ejército israelí ha asegurado que se están centrando «en eliminar a terroristas de alto nivel y ahuyentarlos de la frontera». «Todavía hay camino por recorrer, Hezbolá todavía tiene la capacidad de atacar contra Israel», ha añadido. También el portavoz ha apuntado que sus acciones durante esta madrugada «han enviado un ataque más amplio». Cientos de vecinos de los suburbios meridionales de Beirut permanecen acampados en las calles de la capital libanesa, donde muchos pasaron la noche por miedo a ser alcanzados por los bombardeos israelíes que esta madrugada se sucedieron por el extrarradio. Más de un centenar de vecinos de esos suburbios conocidos como el Dahye y del adyacente campamento de refugiados de Shatila acamparon desde la madrugada en la céntrica Plaza de los Mártires, donde muchos de ellos llegaron con lo puesto y sin haber podido dormir por la tensión acumulada en las últimas horas. El Ejército israelí llamó a los ciudadanos a evacuar puntos específicos del Dahye poco antes de iniciar una primera oleada de ataques. Cazas israelíes han bombardeado este sábado al menos un punto al este de Beirut, coincidiendo con una nueva oleada de intensos ataques aéreos contra la región oriental del país, después de que esta madrugada ya se registraran acciones sin precedente contra los suburbios sur de la capital. Una explosión ha resonado en la capital libanesa a primera hora de este sábado, mientras medios locales han informado de un bombardeo cerca de la localidad de Bhamdoun, a escasos 20 kilómetros al este de Beirut y una zona hasta ahora ajena a la violencia que se concentraba en bastiones del grupo chií Hezbolá. Paralelamente, la Agencia Nacional de Noticias del Líbano (ANN) ha informado de «violentos» bombardeos en varias zonas del oriental Valle de la Bekaa, entre ellas poblaciones del distrito de Baalbek y al menos un punto en Hermel, en la frontera con Siria. También han sido alcanzadas cuatro localidades ubicadas en el centro de la provincia de la Bekaa, en la que se ubica ese valle bastión de Hezbolá, según el medio estatal. «Las Fuerzas de la Defensa de Israel están atacando ahora objetivos terroristas de Hezbolá en la región de la Bekaa, en el Líbano», ha confirmado por su parte el Ejército israelí en un escueto mensaje en su cuenta de X. Asimismo, el ejército ha seguido atacando un nuevo ataque «preciso» en los suburbios meridionales de Beirut, conocidos como el Dahye y bastión de Hezbolá. «(Las Fuerzas Aéreas) llevaron a cabo un ataque preciso en la zona de Dahye en Beirut. Detalles a seguir», ha anunciado el comunicado castrense, sin todavía proporcionar más información. La ANN ha indicado que el bombardeo tuvo como objetivo el barrio de Chiyah, hasta donde se desplazaron varias ambulancias a fin de trasladar a potenciales víctimas. El líder supremo de Irán, Ali Jameneí, condenó este sábado los recientes bombardeos israelíes contra Beirut, en los que, según el Ejército de Israel, habría muerto el líder del grupo chií Hezbolá, Hasán Nasrola, y varias otras personas. «La matanza de personas indefensas en el Líbano reveló una vez más a todos la ferocidad del perro rabioso sionista y demostró la miopía y la política estúpida de los líderes del régimen usurpador (Israel)», denunció Jameneí en un comunicado. El Consejo de Ministros del Líbano celebrará una sesión extraordinaria esta tarde para analizar la situación en el país, después de la campaña de bombardeos israelíes de esta madrugada y del ataque con el que Israel dice haber matado al líder del grupo chií Hezbolá, Hasán Nasrala. «El Gabinete celebrará una sesión extraordinaria a las 19:30 (16.30 GMT) de hoy, sábado 28 de septiembre, en Palacio de Gobierno, para abordar los últimos desarrollos», anunció la presidencia del órgano en un comunicado. La oficina del primer ministro libanés, Najib Mikati, ya adelantó anoche que el dirigente había decidido poner fin a sus reuniones en el marco de la Asamblea General de la ONU en Nueva York y regresar a Beirut «a la luz de los desarrollos en el Líbano tras la agresión israelí contra los suburbios sur de la capital». El viernes por la tarde, un bombardeo israelí de intensidad sin precedentes hizo derrumbarse varios edificios en el extrarradio capitalino, bajo los que el Estado judío asegura que se encontraba la sede central de Hezbolá y donde afirma haber matado a su máximo líder. El grupo chií aún no se ha pronunciado al respecto, mientras que las autoridades libanesas han confirmado el fallecimiento de seis personas y decenas de heridos a causa del ataque. Pocas horas después, cazas israelíes bombardearon numerosos puntos de esos mismos suburbios, coincidiendo con renovados ataques contra el oriental Valle de la Bekaa, también bastión de Hezbolá, y una serie de ataques en el sur del país.