Los grandes ejecutivos españoles no prevén que la Inteligencia Artificial reduzca el número de puestos de trabajo

La inteligencia artificial se ha convertido en una de las principales líneas estratégicas para los directivos de las grandes empresas españoles. Ocho de cada diez reconocen estar preocupados por los aspectos éticos del uso de la IA en sus compañías, pero creen que su implantación no supondrá una reducción significativa del número de puestos de trabajo. Es una de las conclusiones de del informe KPMG CEO Outlook que se publica este domingo con las opiniones de directivos de las 50 empresas españolas que facturan más de medio millón de euros al año.

Estos directivos son optimistas sobre el devenir económico del país y de sus empresas. El 80% confía en que la economía española crecerá en los próximos tres años y un 76% cree que la facturación en su compañía también aumentará. La cifra es inferior a la del año pasado (86%), pero es similar a la de otros países analizados. Es aún mayor, casi del 100%, el número de directivos que dice tener previsto ampliar plantilla durante los próximos años.

El informe revela como la inflación, que el año pasado salía mencionado como el principal reto para los directivos, ha pasado a un segundo plano. Ahora son las iniciativas de sostenibilidad y la implantación de la inteligencia artificial las dos prioridades estratégicas de estos primeros ejecutivos. Un 60% de ellos prevé invertir en la inteligencia artificial con independencia de la situación económica, aunque la mayoría prevé no obtener retornos hasta dentro de tres años. Además, de las respuestas de estos directivos se desprende que la apuesta por la IA no va a ir en detrimento de los puestos de trabajo. Así lo afirman el 80% de los encuestados, aunque la mayoría cree que sus empleados no tienen a día de hoy la formación necesaria para aprovechar el potencial de esta innovación.