Alcaraz rompe la muralla de Sinner y consigue su primer Open de China en un partido para el recuerdo

Carlos Alcaraz y Jannik Sinner han protagonizado una final del Open de China para el recuerdo. La alternancia en el marcador fue el principal atractivo, ya que cualquiera de los dos pudo llevarse el torneo de su lado en un encuentro que terminó superando las tres horas de duración. El partido, de auténtico infarto, se decidió en el 'tie-break' del último set y ahí se reflejó lo que ha sido la trayectoria de Carlitos por todo el torneo. Cuando más complicado lo tenía, con un Sinner dominando el parcial por 3-0, siete puntos seguidos del murciano le permitieron alzar los brazos para festejar -por todo lo alto- que es el nuevo campeón del Open de China. 6-7(6), 6-4 y 7-6(3) fue el marcador definitivo de un partido que, sin lugar a dudas, queda en el recuerdo de Alcaraz, de Sinner también y, por supuesto, de todos los aficionados a este deporte.

La resiliencia de Sinner

El primer set cayó del lado de Jannik Sinner en un auténtico ejercicio de resistencia del tenista italiano. Cuando todo iba de cara para Alcaraz, ahí más apretó el actual número uno del mundo hasta forzar un 'tie-break' que terminó cayendo de su lado. El inicio de Carlitos fue el habitual durante todo el torneo, con firmeza y con dureza en sus golpes para comenzar mandando muy pronto en el marcador. Pese a desaprovechar tres bolas de rotura en su primer servicio al resto, consiguió un importante 'break' que le permitió colocarse con 1-3 en el marcador. Con juegos rápidos y sin fallos en el saque, el partido se fue hasta un 5-3 para Alcaraz y con servicio a su favor para cerrar la primera manga.

En ese contexto, el italiano apretó en su juego e hizo fallar a Alcaraz, que perdió por primera vez su saque en todo el encuentro. No estuvo especialmente bien con los primeros y eso metió a Sinner en la final. Tanto fue así que, llegado el 'tie-break' definitivo, dos 'mini-breaks' seguidos del actual número del mundo en el momento más decisivo sirvieron para que se llevara el tanteo por 8-6 y se adjudicara la primera manga, obligando al murciano a tener que remontar si quería conseguir el primer Open de China de su carrera.

El momento clave de Alcaraz

La tensión no pudo estar más presente durante todo el segundo set. El duelo entre el número 1 y el número 2 del ránking ATP no defraudó a nadie y ambos tenistas realizaron un tenis de muchos quilates. Sólidos en sus saques, los dos parecían ser plenamente conscientes de que el momento de apretar los dientes iba a llegar en los juegos finales, tal y como sucedió en la manga anterior.

Sin lugar a dudas, el punto de inflexión llegó en el octavo juego del segundo set. Con 4-3 a favor de Sinner y con servicio para Alcaraz, el murciano tuvo que sudar -y mucho- para llevarse un juego que se fue hasta en ocho veces al 'deuce' (dos bolas de 'break' para el italiano incluidas). Lo levantó Carlitos y eso hundió mentalmente a un Sinner que perdió su siguiente juego, colocando todo de cara para que Alcaraz se llevara el set y hacer que la final se decidiera en el tercero y último. En esta ocasión, el murciano no falló y cerró el parcial con un 6-4 de su lado.

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Un último set que pudo llevarse cualquiera

Alcaraz puso la directa en el inicio de la tercera -y última- manga. Motivado por el final del anterior set, un 'break' tempranero de Carlitos le puso por delante para poner el 3-1 de su lado. De hecho, la brecha pudo ser mayor aún si hubiera aprovechado dos bolas de rotura que tuvo en el siguiente juego, pero el actual número 1 del mundo consiguió reaccionar hasta llevarse el juego. Sin embargo, la realidad era muy distinta: Alcaraz estaba mucho mejor en el partido y tenía a su merced a un Sinner que necesitaba reaccionar si quería llevarse el torneo.

Nunca se debe minusvalorar al actual número 1 del mundo. Cuando mejor estaba Alcaraz, un 'contra-break' de SInner igualó la final a cuatro. Varios errores del tenista murciano los aprovechó un Sinner que, se llevó el partido hasta un peligroso 5-4 en donde restaba el servicio del murciano para llevarse el Open de China. Alcaraz lo salvó y, de hecho, tuvo una oportunidad de oro para haber evitado el 'tie-break' porque, en un juego muy largo, tuvo una bola de rotura que le pusiera con 6-5 y saque para cerrar el set. Sin embargo, no fue así y el encuentro tuvo que decidirse desde el desempate en la última manga.

En el 'tie-break', Sinner comenzó mandando por 3-0, pero la resistencia de Carlitos tuvo su recompensa y con siete puntos seguidos remontó el desempate hasta llevarse el torneo. Alcaraz recordará siempre su primer Open de China porque ha tenido que trabajar, y mucho, para poder conseguirlo.