Así son los hospitales de campaña de la Franja de Gaza: "En el más cercano, hay más de dos niños por cama"

Madrid

Ahora mismo, en la Franja de Gaza solo están operativos 9 de los 36 hospitales que había antes de que empezara la guerra, el pasado 7 de octubre. Los otros 17 están tan dañados que apenas sirven para nada. Ante esta situación, la oenegé Médicos sin Fronteras ha montado en Gaza, en la zona de Deir al Balah, dos hospitales de campaña.

"Estos dos hospitales de campaña no deberían existir. Existen porque tenemos una destrucción del sistema sanitario de las estructuras hospitalarias por parte de las fuerzas israelíes", explica Alexandre Marcou, portavoz de Médicos sin Fronteras en Jerusalén, en declaraciones a la SER. Además, explica que en la zona de Al-Mawasi, una supuesta zona segura cerca de donde han montado estos hospitales, "vive más de un millón de personas hacinadas en 41 kilómetros cuadrados". Es como meter a todos los ciudadanos de Barcelona en Irún, Alcobendas o Benidorm.

Además, los hospitales que quedan en la zona, están destruidos. Anais es la jefa de enfermería del hospital de campaña de Médicos sin Fronteras en Deir al Balah. A través de la oenegé, Anais nos ha enviado un vídeo en el que explica las condiciones del hospital y las condiciones en las que trabaja cada día. En ese vídeo, explica que en el hospital permanente más cercano, el hospital de Al Aqsa, "hay más de dos niños por cama y muchos duermen en el suelo o en los pasillos".

Así son los hospitales de campaña

Estos hospitales de emergencia no son hospitales al uso, de hecho, no se suele utilizar ni siquiera cemento en su construcción. No hay que pensar en un edificio, sino más bien en tiendas de campaña e instalaciones precarias: "Son tiendas de acampar muy grandes y recubiertas con plástico", explica Marcou, que también nos cuenta que, en el primero de los hospitales que levantaron, "tenemos unas 28 camas entre la zona para operar y también para la gente que necesita pasar ahí la noche. 28 camas que podríamos extender a 40 si hubiese menos dificultad en la entrada de material, que nos llega gota a gota".

En estos hospitales, Médicos Sin Fronteras atiende hasta 250 pacientes en un día. En la primera semana, en funcionamiento del segundo hospital, "hemos atendido a 2.000 personas en solo una semana", nos cuenta Anais. La jefa de enfermería, además, explica que "casi todos tienen una infección de la piel relacionada con la falta de higiene y el hacinamiento. Nos hemos quedado sin cremas para tratar estas enfermedades y ahora estamos usando antibióticos orales; los mismos que solemos priorizar para otras infecciones y que, por supuesto, se agotarán".

"Los médicos se acuestan sin saber si van a morir"

Y si las condiciones de los pacientes son inhumanas, las de los médicos, enfermeras y resto de personal sanitario no son mejores: "Viven en tiendas de campaña y se despiertan todas las mañanas para ir al hospital, para dar ese trato médico. Hacen como pueden, oímos relatos muy duros de la gente que tienen que amputar. Cada noche se van a dormir y no saben si ellos mismos o sus familias van a resultar heridos o van a morir", explica el portavoz de Médicos sin Fronteras en Jerusalén.

Desde que empezó la guerra, según la propia oenegé, seis de sus compañeros han sido asesinados en Gaza, en alguno de los 26 ataques que las tropas hebreas han lanzado contra alguna de sus instalaciones.