"Yo para ser feliz no quiero un camión": una profesión sin relevo generacional

Trabajar conduciendo un camión o un autobús implica estar al volante durante largas jornadas, incluso días en carretera. Prácticamente el 96% de las mercancías se mueven por carretera y en cada trimestre de los últimos años, se mueven entre 300.000 y 400.000 toneladas de producto, según el Observatorio de Logística y Transporte del Ministerio de Transportes. Por tanto, este es un sector clave en materia de abastecimiento, también en movilidad. El uso del autobús ha aumentado en más de un 11% en lo que llevamos de año y sigue siendo la opción más utilizada.

El problema es que no hay trabajadores suficientes para hacer frente a las exigencias del sector. El relevo generacional es escaso y el envejecimiento de la plantilla sigue acelerándose: 1 de cada 3 camioneros se jubilará en la próxima década de los casi 400.000 que hay en en el país según datos de la Federación Nacional de Asociaciones de Transportistas de España. Se trata de una plantilla que aumenta su edad y que además no tiene reconocido el derecho a jubilación anticipada.

En España ahora tenemos 30.000 vacantes sin cubrir y en Europa la cifra sube a 745.000. Del total de conductores españoles, solo el 4,5% tiene menos de 25 años. Y prácticamente pasa lo mismo con los autobuseros. Ahora la edad media para sacarse ese carnet de conducir es de 49 años, solo el 11% tiene menos de 40.

Guía práctica contra la sumisión química

En los últimos años ha aumentado de forma considerable el número de diagnósticos y cuadros clínicos de sumisión química, especialmente en mujeres jóvenes. Los médicos aconsejan que ante cualquier sensación extraña, por ligera que parezca, es recomendable ir al hospital. Puede ser una resaca rara, lagunas sobre la noche anterior o cualquier incomodidad.

En este episodio vas a escuchar a Andrés Santiago, jefe de medicina legal y forense del hospital clínico de Madrid. Asegura que el tiempo marca la diferencia en los casos de sumisión química y es clave. Sustancias como el GHB, mal llamado, éxtasis líquido, es muy potente, muy rápido y muy silencioso. En unas horas desaparecen de la sangre. Pero basta con pasarse con el alcohol para acabar semiinconsciente y ser víctima de lo que se llama "sumisión química oportunista", en la que alguien se aprovecha de ese estado, aunque no lo haya provocado.

Las estadísticas del ministerio de Justicia reflejan que los casos de agresión sexual con sospecha de sumisión química han crecido un 75% entre 2021 y 2022, que es el último año con datos. Precisamente por eso hemos recopilado en este episodio una guía práctica para saber qué hacer si alguien sospecha que pudo haber sufrido una sumisión química.

Mafalda cumple 60

Crónica 24/7 viaja a Argentina para escuchar cómo se homenajea allí a Mafalda, la niña de 6 años que dibujó por primera vez Quino en 1964 para dar voz a la clase media de Argentina. El personaje se universalizó y sus frases icónicas, divertidas, todavía se adaptan perfectamente a la realidad social del mundo, aunque hayan pasado 60 años.