Armas de distracción masiva
La señora Díaz Ayuso esta logrando que se hable de todo salvo del dinero que ella debe destinar a permitir que las universidades funcionen de manera correcta
Armas de distracción masiva
Madrid
La capacidad de manejar armas de distracción masiva que tienen algunos políticos es impresionante. Se esfuerzan muchísimo en colocar en primer plano del debate temas lo suficientemente agresivos como para que unos se regocijen y otros se echen las manos a la cabeza. Lo importante es que no se hable de lo que ellos no quieren que se hable. Ese es su objetivo fundamental. Puede ser considerado casi un arte, algo sucio, pero un arte al fin de cuentas, porque exige una enorme capacidad de interpretación y de descaro.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Diaz Ayuso, es una verdadera artista. Resulta que estos días debe decidirse el presupuesto de la Comunidad y dentro de ese presupuesto cuánto dinero se dedica a sostener las universidades públicas. Los rectores de las cinco universidades públicas de Madrid reclaman un aumento mínimo de 200 millones de euros para poder hacer frente a sus obligaciones. No parece una cifra descabellada porque la Comunidad de Madrid dedica actualmente un 21% menos que la media de gasto por alumno en el resto de las universidades públicas de España.
La señora Díaz Ayuso esta logrando, sin embargo, que se hable de todo, salvo del dinero que ella debe destinar a permitir que esas universidades funcionen de manera correcta. La miseria académica de la Educación Superior en Madrid es una seña de identidad de los gobiernos del PP: ya en su momento el de Esperanza Aguirre fue condenado por el Tribunal Supremo por incumplir el plan de inversiones comprometido. Y la cosa sigue igual. Pero no hay forma de hacer que la señora Díaz Ayuso flaquee en su trágica interpretación.
Soledad Gallego-Díaz
Es periodista, exdirectora del periódico 'EL...