El Centro de Inteligencia contra el Terrorismo admite que la inestabilidad en Oriente Próximo está amplificando el riesgo de atentados
La SER ha hablado con el máximo responsable de Inteligencia de la lucha antiterrorista del Ministerio del Interior, el general de División de la Guardia Civil, Manuel Navarrete, director del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) que cumple 10 años
Madrid
La amenaza terrorista preocupa seriamente porque Daesh y AlQaeda están aprovechando la causa palestina para incrementar su propaganda contra occidente. Los equipos de lucha antiterrorista han intensificado todos los seguimientos de actores solitarios y en especial, la propaganda y el adoctrinamiento a través de Internet. Las unidades de lucha antiterrorista están cooperando con los proveedores de Internet para limitar la viralidad de esos mensajes de radicalización).
El general de división de la Guardia Civil, Manuel Navarrete Paniagua tiene una amplia experiencia en la lucha contra el terrorismo. Su primer destino fue el Servicio de Información de San Sebastián en 1985, allí pasó por diferentes puestos de trabajo en las unidades centrales de la Jefatura de información del cuerpo, siempre vinculado a la lucha contra ETA. Su trayectoria evolucionó para combatir el terrorismo yihadista, momento en el que adquirió amplia experiencia internacional tras su paso por la misión de la Comunidad Europea Sudáfrica, en 1994, donde se hizo cargo del área relacionada con el terrorismo internacional. Como coronel, en 2014, fue nombrado jefe de Área de contraterrorismo e inteligencia financiera de Europa. Y desde el año 2020 ostenta el cargo de director del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO).
10 años después del nacimiento del CITCO ¿cuál ha sido el gran logro en estos 10 años de lucha contra el terrorismo?
En los dos ámbitos en que los que el CITCO tiene competencia: la lucha contra el terrorismo, la radicalización violenta y el crimen organizado se ha avanzado mucho gracias a la gran labor que hacen las Fuerzas y Cuepos de Seguridad del Estado. El Centro de Inteligencia Contra el Terrorismo y el Crimen Organizado del Ministerio del Interior es un instrumento de apoyo a la labor que hace nuestra Policía Nacional, la Guardia Civil, Vigilancia Aduanera, Ertzaintza, Mossos d'Esquadra, Policía Foral de Navarra y también los servicios de inteligencia. Yo creo que hemos pasado de una etapa muy anterior más de 10 años de competitividad a una etapa de colaboración de mayor coordinación y eso se ve en la eficacia de las actuaciones que vemos actualmente en terrorismo y en crimen organizado. Los niveles de seguridad en España están altos gracias a que hay una estrategia que se mantiene, hay un gran acopio de inteligencia, hay una coordinación entre las fuerzas policiales e inteligencia, que permite que neutralicemos la amenaza lo más anticipada posible y por tanto los niveles de seguridad sean muy favorables en nuestro país.
Los expertos inciden en que Hamás no es Daesh, pero ¿Cómo está afectando la inestabilidad de la crisis de Oriente Medio a la amenaza terrorista? ¿Se ha incrementado?
Efectivamente, la situación que se produjo después del ataque terrorista de hace un año por parte de Hamás contra ciudadanos de Israel ha provocado una convulsión en este ámbito y sabemos las consecuencias que eso tiene en el conflicto. Otros grupos terroristas como AlQaeda o como Daesh intentan explotar esa situación de la causa palestina, como ellos le llaman, pero solo para utilizarlo como un instrumento para hacer llamadas a cometer ataques terroristas. En el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado hace mucho que realizamos un seguimiento de toda la propaganda, toda la incitación, toda la provocación, que desde estos grupos se lleva haciendo. Además, junto a nuestros socios europeos hemos hecho ejercicios para en cooperación con los proveedores de Internet para limitar la viralidad de esa incitación de esa manipulación y evitar que puedan organizar ataques terroristas. Por tanto, nos preocupa mucho que los grupos terroristas puedan aumentar la tensión y la radicalización para que alguien pueda pensar que la violencia es una opción. Hemos que ha pasado en algunas ocasiones en Europa, tenemos contabilizados ataques que nos han informado nuestros socios europeos contra sinagogas, contra algún otro tipo de intereses vinculados a Israel, donde efectivamente la llamada de Daesh para hacer actuaciones en este ámbito ha tenido un cierto eco y se han producido ataques. En España, afortunadamente, no tenemos esa dimensión agresiva, pero estamos muy vigilantes para que eso no ocurra y detectarlo cuanto antes si fuera el caso.
La retirada parcial de Irak, la salida de Afganistán… se está debilitando el muro de contención del yihadismo, el Sahel es sin duda uno de los focos más preocupantes, ¿se está llegando a punto de no retorno?
Las misiones de carácter militar, también de apoyo policial, que la Unión Europea y otros países teníamos en el Sahel, digo teníamos porque la mayoría se han retirado, fundamentalmente eran de apoyo a las estructuras militares y policiales de los países para contener y combatir el terrorismo en estos países. Efectivamente el terrorismo ha tenido una mayor dimensión, junto a una mezcla de vandillismo con terrorismo, que aprovecha todas las posibilidades y explota las debilidades del país. Por tanto, esa expansión se debe también al cambio que se ha producido en alguno de estos países, eso está evitando que pueda haber una actuación más directa y un apoyo de fuerzas de seguridad y también de apoyo militar por parte de países de la Unión Europea. La ausencia del imperio de la ley, la ausencia de instituciones fuertes, la ausencia de una estrategia clara contra el terrorismo y de instrumento para combatirla hace que desde el punto de vista de acciones terroristas en la zona del SAHEL sea donde más víctimas están produciendo actualmente. Esa situación que vemos allí nos preocupa mucho, afortunadamente, no está contagiándose más allá de esta zona porque los países del norte de África del Mediterráneo sur, Marruecos, Argelia, Túnez y Libia están haciendo una gran labor también de actuación de contención en muchos casos en cooperación con los países europeos. Pero, nos preocupa y nos ocupa y creo que el mantenimiento de las misiones allí hubiera ayudado a que esta amenaza no se hubiera desarrollado como actualmente se está desarrollando.
En la nueva Estrategia Nacional contra el Terrorismo se detalla que “el aumento de los flujos migratorios irregulares puede ser aprovechados por elementos terroristas para dar cobertura a sus desplazamientos”. En lo que va de año, la llegada de migrantes por vía marítima y terrestre ha aumentado un 59%, en especial en Canarias, un 105% más. ¿Cuál es el riesgo real de que haya terroristas que se cuelen en pateras?
Estos movimientos masivos migratorios siempre tienen un componente que los terroristas pueden utilizar de manera parasitaria. Lo que estamos viviendo en España no tiene la dimensión 2015, ahora es una migración fundamentalmente económica, pero efectivamente siempre hay un componente de seguridad que tenemos que contemplar, para ello el despegue que hay de Fuerzas de Seguridad especialmente en Canarias, de Policía y de Guardia Civil, también de inteligencia va orientado a identificar esas posibles parasitaciones, esas posibles infiltraciones que los terroristas puedan intentar. Son muy pocos los casos que hemos detectado, pero sí hemos detectado casos, recuerdo un caso en Almería hace tiempo y otro en Barcelona donde con la información que se obtuvo, en cooperación internacional, se identificó estas personas, fueron detenidas y puestas a disposición judicial. Es un componente que siempre estamos encima, en cualquier masividad efectivamente es más complicado, pero tenemos también instrumentos para estar atentos y vigilantes para evitar que eso ocurra.
El Departamento de Seguridad Nacional admite que la radicalización en prisiones convierte a las cárceles en un terreno fértil para la captación de potenciales terroristas.
Ahora mismo según datos de Instituciones penitenciarias, dentro del fichero FIES, es decir, dentro del seguimiento de los condenados por terrorismo, hay 82 personas con condenas por terrorismo y hay otros 70 presos que son susceptibles de ser captados. ¿Cuándo estos internos salen de prisión, son vigilados de alguna forma especial?
Como usted sabe en España la ley nos exige y, además, estamos convencidos de que todos los presos que están cumpliendo condena o que están en prisión preventiva deben tener un tratamiento individualizado. En los casos en los que se observa por parte de los funcionarios una progresión en una mente radical que puede llevar a la violencia, lógicamente se hace un seguimiento de ellos y se informa para que se le ofrezcan alternativas a esa situación.
Hay un seguimiento individual de cada una de estas personas desde hace unos años, con el cambio legal que se produjo se pueden aplicar medidas de libertad vigilada de hasta 10 años a personas que han sido condenadas por terrorismo, eso va dentro de la sentencia judicial cuando eso se produce y estas personas sale en libertad vigilada se hace una evaluación de esa persona y se informa a Instituciones Penitenciarias y al juez de custodia sobre cuáles son las medidas que se proponen para asegurar que esa libertad vigilada. Si hay una evolución negativa de esa persona, el juez determina que esas medidas son acordes con la sentencia. Es decir, hay un seguimiento de estas personas que aunque salgan libertad vigilada deben cumplir una serie de requisitos y asegurar que en la medida de lo posible no evolucionan hacia una violencia en la radicalización.
Recientemente han quedado en libertad Yolanda y Luna, esposas que dos terroristas del Daesh, que fueron repatriadas desde Siria, desde los campos de detención de Al-Roj… La Oficina de Lucha contra el Terrorismo de Naciones Unidas recomendaba en su último informe sobre el estado del Daesh que los estados deben repatriar a sus nacionales, ¿esas repatriaciones son un riesgo?
En el CITCO somos el punto de contacto para hacer el seguimiento de todas las personas que tienen alguna vinculación en España, personas que han decidido unirse a los grupos terroristas en el extranjero. Hacemos un seguimiento junto con todas las Fuerzas de Seguridad. Se incluyen casos en el ámbito de lucha de terrorismo que puedan haber incurrido, estas personas que se repatriaron en esa fecha tenían una orden de detención pendiente y en el momento en que llegaron al suelo español se le aplicó la orden de detención que tenía pendiente y se puso inmediatamente a disposición de la de la Audiencia Nacional – el caso de Yolanda y Luna-. El juez de guardia en este caso tenía la orden emitida, tomó las medidas que consideró oportunas es decir el tratamiento es el tratamiento ordinario por supuesto que las personas que han estado supuestamente integradas en grupos terroristas como ha sido el Daesh en Siria o en cualquier otro sitio, en Irak, su potencial es más alto de que aquellos que no han estado expuesto a esa violencia extrema y por lo tanto para los servicios de inteligencia y la fuerza de seguridad tienen un seguimiento de todo ese tipo de actuaciones pero lo que se está haciendo es como siempre aplicar la ley individualmente.
¿Hasta qué punto las criptomonedas se han convertido en un nuevo flujo de financiación para estos grupos terroristas, y cómo dificulta que puedan llegar al corazón de las cuentas terroristas?
Mire, como pasa en la vida ordinaria la complicación del aparato financiero va en función de cómo complicada o como de jerarquizada esté la estructura en general de los grupos terroristas. La verdad es que tienen una estructura muy consolidada, peor necesitan aparatos financieros más fuertes, más actuaciones en el ámbito de la obtención de fondos de la extorsión o cualquier medida que puedan utilizar para incrementar su capacidad financiera y desarrollar actuaciones terroristas. Lo que hemos visto en Europa en los últimos 10 años que además es lo que celebramos con los 10 años del CITCO es el seguimiento de la mayoría de los ataques terroristas que se han basado en una microfinanciación, es decir, no hemos visto grandes aparatos de financiación de grupos terroristas porque no lo necesita. Son actuaciones individuales con una financiación muy pequeña o relativamente pequeña, pero que pueden llevar a cabo acciones terroristas, en algunos casos relativamente sofisticadas.
Javier Bañuelos
Redactor Jefe en la Cadena SER responsable de la información sobre Interior y Defensa. Antes trabajé...