Almacenar píldoras abortivas o blindar la lucha contra el clima: los estados demócratas se protegen por si Trump gana la batalla electoral en EEUU

En un almacén de Washington hay guardadas bajo llave 30.000 pastillas de Mifepristona, la píldora abortiva más utilizada en Estados Unidos. El gobernador del estado, Jay Inslee, decidió guardarlas ahí el año pasado, cuando un juez conservador intentó prohibirlas en todo el país. Ahora, a menos de un mes para que se celebren las elecciones presidenciales en Estados Unidos, las encuestas continúan dibujando un empate entre Donald Trump y Kamala Harris.

Este panorama deja abierta la posibilidad de que el candidato republicano vuelva a gobernar, así que los estados demócratas están aprobando medidas a contracorriente para evitar que el futuro mandatario pueda legislar en contra. "Necesitamos un estado que proteja a las mujeres", ha dicho Inslee recientemente, cuando explicaba la decisión de guardar los medicamentos para que las mujeres puedan abortar libremente.

Este es solo un ejemplo de las medidas que los llamados 'estados azules' están tomando para protegerse ante una posible victoria de Donald Trump en noviembre. No quieren que haya sorpresas de última hora como en el año 2016, cuando esperaban una victoria de Hillary Clinton. "Se están curando en salud, es probable que Trump se haga con la victoria, muchas más que en 2020", explica Juan Tovar Ruiz, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad de Burgos.

La estrategia de protección abarca múltiples asuntos, sobre todo los que tienen que ver con temas sociales. Los demócratas temen que si Trump es reelegido designe más jueces de extrema derecha que puedan suspender derechos del colectivo LGTBIQ+. Así que territorios como Virginia han aprobado una nueva ley que garantiza que el matrimonio entre personas del mismo sexo, para que siga siendo legal independientemente de cualquier decisión judicial futura. También Hawai, California o Colorado quieren impulsar en las elecciones de noviembre enmiendas constitucionales que lo garantizarían.

El clima es otra de las batallas del candidato republicano. Es conocida su posición sobre la adhesión al cuerdo climático de París, del que quiere retirar a Estados Unidos. Trump ha anunciado, además, su intención de revocar el poder del estado de California para establecer sus propios límites de contaminación para automóviles y camiones. Así que el gobernador de ese estado, Gavin Newsom, está blindando la protección del medio ambiente. El demócrata ha buscado incluso apoyos en el extranjero, cerrando acuerdos con países como China o Australia.

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