"Significa que tiene huevos, me parece bien": Ancelotti no echa el freno al pique de Bellingham con Vinicius
El italiano habló con claridad sobre el enfado de Bellingham tras no recibir un pase del brasileño para marcar ante el Celta
Bellingham y Vinicius, durante el partido de Liga ante el Villarreal / Diego Souto
El Real Madrid se llevó los tres puntos de Balaídos sufriendo ante un Celta que no le perdió la cara al partido y explotó las dudas defensivas que aún arrastran los de Ancelotti. Dos zarpazos de Vini y Mbappé permitieron a los blancos ganar el partido, a pesar del tanto de Swedberg, en los apenas tres disparos a puerta del equipo. Courtois fue el otro gran protagonista, manteniendo el marcador cuando más lo necesitaba el Real Madrid y, en definitiva, la alineación con tres centrales y carrileros no dejó ver la mejor versión del equipo merengue.
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Una de las acciones más comentadas del partido, sin embargo, fue la protagonizaron Vinicius y Bellingham tras un disparo errado del brasileño. A pocos minutos del añadido, con el 0-1 favorable al Madrid en el marcador, Vinicius encontró el hueco por la izquierda para trazar una gran jugada individual. Sin embargo, optó por disparar con poco ángulo y su remate se marchaba muy alto sobre la escuadra izquierda de Guaita. Bellingham, que esperaba con espacio en el segundo palo, no entendió el gesto de su compañero y lo demostró con un tremendo enfado.
El inglés comenzó a hacer aspavientos con ambos brazos mientras criticaba la acción de Vinicius. Tras dejar un par de patadas contra el césped, el '5' no se dirigió hacia su compañero a recriminarle la acción, pero su gesto no mostraba satisfacción. Preguntado por esta acción en rueda de prensa, Ancelotti aseguró no haberla visto desde el banquillo, pero tuvo claro su juicio sobre el gesto de Bellingham: "Si ha sucedido, significa que tiene huevos, carácter y me parece bien".
Ancelotti, lejos de juzgar a su jugador, apostó por alentar este comportamiento: "Sinceramente, no me di cuenta de la jugada, la veré. Pero si ha reaccionado...". El italiano también quiso dejar claro que la relación entre ambos es buena y que no hay riesgo de una ruptura en el vestuario, pero el gesto queda ahí: "Tranquilidad, tras el partido estaban hablando, riendo. No tienen problemas".
El entrenador italiano también entonó el 'mea culpa' sobre el dibujo y su falta de rendimiento sobre el campo. Con Tchouamení encajado entre los centrales y Lucas y Fran García actuando como carrileros, la solidez defensiva no fue el fuerte de los blancos, que acabaron sufriendo ante un Celta valiente: "Tchouamení ha jugado, cuando teníamos el balón, entre los dos centrales. Ahí tuvimos un problema de equilibrio en la primera parte porque, si con balón eran tres, sin él tenía que adelantarse... y cometíamos errores. Yo no lo expliqué bien".
Sobre la posición del propio Bellingham, Ancelotti reconoció que la había modificado para intentar explotar las debilidades del equipo celeste. El inglés no vio puerta, pero Ancelotti quedó satisfecho con su cambio: "La idea era entrar con él desde segunda línea por banda derecha, porque el Celta venía sufriendo con balones al segundo palo, encajando. Probamos con Jude en esta posición y, a mí, me ha gustado mucho".
