Las infecciones de transmisión sexual, desbocadas: la gonorrea sube un 42,6% en dos años
Según el informe del Centro Nacional de Epidemiología, las ITS no han dejado de aumentar desde el año 2000 y, especialmente, en la última década. Además de la gonorrea, la sífilis ha subido un 24,1% entre 2021 y 2023 y la tasa de clamidia se ha multiplicado por cuatro desde 2016
Menos miedo al VIH, más infecciones de transmisión sexual
MADRID
Las infecciones de transmisión sexual no dejan de crecer en nuestro país, según el informe 'Vigilancia Epidemiológica de las Infecciones de Transmisión Sexual en España 2023', que ha publicado este lunes el Centro Nacional de Epidemiología. La gonorrea está disparada: las infecciones han aumentado un 42,6% entre 2021 y 2023 (con 34.400 casos notificados el año pasado). La sífilis le sigue muy de cerca: los casos han crecido un 24,1% en esos dos años (casi 11.000 infecciones en 2023). Y la clamidia está desbocada también: en 2016 no llegaba a 20 casos por cien mil habitantes. En 2023, ya eran 80.
Los datos reflejan que este aumento se da sobre todo en hombres: son 8 de cada 10 casos de gonorrea, casi 9 de cada 10 de sífilis y el 98% del linfogranuloma venéreo. Sólo en el caso de la clamidia, las infecciones están equilibradas entre hombres y mujeres. Y si nos fijamos en la edad, entre los chicos son los jóvenes de entre 25 y 34 años los que suman más casos de infecciones de transmisión sexual. Pero entre las chicas, son aún más jóvenes las que más casos notifican de gonorrea y clamidia: la mitad de las infecciones se dan en menores de 25 años.
Se ha perdido el miedo al VIH y, con él, el uso del condón
"Normalmente no se usa el preservativo, mucha gente piensa que el VIH ya no es un problema, por eso se han incrementado tanto otras infecciones de transmisión sexual en los últimos años", explica Mar Vera, doctora en la clínica Sandoval de Madrid, de referencia en la atención de ITS. Aunque apunta que las causas de este aumento son múltiples: los usuarios de la profilaxis contra el VIH (la conocida como PrEP) pasan controles cada cierto tiempo y eso hace que aumente la detección de otras infecciones; las prácticas de riesgo como el chemsex -practicar sexo bajo los efectos de las drogas-, el inicio cada vez más temprano de las relaciones sexuales y, sobre todo, lo ya mencionado: la banalización, por así decirlo, del VIH, y la no utilización del preservativo. Esta especialista, que es miembro del grupo de trabajo de ITS de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), hace un llamamiento a que se utilice este método de protección pero también a que se normalicen los chequeos de ITS: se pueden pedir en clínicas especializadas, como la Sandoval en Madrid, o al médico de familia, para que nos derive. Esto es importante, recuerda, porque estas infecciones pueden cursar de forma silenciosa, sin síntomas, lo que hace difícil detectarlas y cortar la cadena de transmisión.
El Ministerio de Sanidad, que reconoce este problema, acaba de actualizar las Guías de Manejo de las ITS en la sanidad pública, con el objetivo, explican, de frenar y revertir este aumento de las infecciones.