La Iglesia Católica de Francia se niega a cobrar 5 euros de entrada a Notre Dame
La ministra de Cultura francesa, Rachida Dati, ha propuesto que los turistas paguen en la reapertura de la catedral el próximo 8 de diciembre, mientras que la Diocesis de Notre Dame mantiene el principio de libre acceso
La Iglesia Católica de Francia se niega a cobrar 5 euros de entrada a Notre Dame
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El próximo 8 de diciembre se reabrirá al público la catedral de Notre Dame tras el desvatador incendio que calcinó gran parte del edificio en 2019. A pocas semanas de su reinauguración, "el alma de Francia" se ha visto envuelta en un gran debate: ¿se debe cobrar 5 euros de entrada a los turistas que quieran visitarla?. Esta ha sido una propuesta de la ministra de Cultura de Francia, Rachida Dati, para ayudar a preservar las iglesias francesas que se encuentran en mal estado. Sin embargo, la Iglesia católica romana de Francia se ha opuesto firmemente a la idea.
El proyecto puede recaudar hasta 75 millones de euros al año
Según la ministra, la recaudación sería íntegramente destinada un gran plan de conservación del patrimonio religioso de Francia. "Notre Dame salvaría todas las iglesias francesas. Sería un símbolo magnífico" afirma Dati. Por su parte, el ministro de Interior francés, Bruno Retailleau, ha elogiado la propuesta. "Cinco euros pueden salvar el patrimonio religioso de Francia, y es algo positivo, se crea en el cielo o no", asegura.
El alcalde del centro de París, Ariel Weil, asegura que, aunque la propuesta de la ministra no es posible, saca a relucir la cuestión de las inversiones colosales que requiere a nivel nacional el patrimonio religioso de Francia. "No es absurdo pensar en cómo irían las cosas si los casi 14 millones de visitantes que llegan cada año aportaran su granito de arena. Quizás una contribución voluntaria, con una tarifa de entrada sugerida podría ser la solución” afirma.
La Fundación del Patrimonio Nacional de Francia segura que más ed 5.000 edificios religiosos están en peligro
El estado de estas capillas, iglesias, abadías y monasterio es muy preocupante. Sin embargo, la Iglesia católica francesa se aferra al principio de libre acceso para todo el mundo, ya sean fieles o turistas. "Dado el diseño de Notre Dame, establecer un sistema que distinguiera entre turistas y personas que acudían a la catedral para orar en privado sería extremadamente complicado en términos prácticos”, así lo ha asegurado en un comunicado la Diocesis de Notre Dame.