Los ocho detenidos, de ciudadanía alemana, llevaban a cabo entrenamientos paramilitares con equipos de combate, convencidos de que debían prepararse para un colapso del Estado alemán. Y para ello practicaban con armas de fuego, realizaban marchas nocturnas y forzadas, así como patrullas. Incluso habían adquirido trajes de camuflaje, cascos de combate, máscaras antigás y chalecos protectores. Su objetivo: conquistar por la fuerza zonas del estado federado de Sajonia y probablemente también de otras regiones de Alemania del Este para establecer allí un Estado y una sociedad alineados con el nacionalsocialismo. Si fuera necesario, planeaban expulsar de la zona “a grupos de personas indeseables” mediante una limpieza étnica. Según la Fiscalía Federal, formaban parte de una organización terrorista de extrema derecha y ámbito alemán audodenominada ‘Separatistas sajones’. Un gupo pequeño, de unas quince o veinte personas, fundado en 2020, cuya ideología aglutina un puñado de ideas racistas, antisemitas y, en algunos casos, apocalípticas. Según los investigadores, sus integrantes comparten un profundo rechazo al orden básico democrático de la República Federal de Alemania. Para ellos “no hay duda de que Alemania está al borde del colapso y que el Estado y la sociedad se derrumbarán en un «Día X» aún por determinar. Los ocho miembros de la organización han sido detenidos en las localidades de Leipzig, Dresde, Meißen y en Zgorzelec (Polonia). En la redada se han desplegado más de 450 agentes de las fuerzas de seguridad y de la policía de la Oficina Federal de Policía Criminal, así como fuerzas especiales de la Policía Federal y de la Oficina de Policía Criminal del Estado de Sajonia. Además, han procedido también al registro de una veintena de inmuebles. Las medidas siguen aún en curso y se dirigen también contra otros siete imputados. Algunos son menores. El mayor de ellos tiene 25 años. Según la Agencia Alemana de Prensa, uno de ellos sería un concejal del partido de ultraderecha Alternativa por Alemania en Grimma. “Es un gran éxito que el fiscal general federal y las autoridades de seguridad hayan podido descubrir estos escandalosos planes y arrestar a los responsables, afirma el ministro federal de Justicia, Marco Buschmann (FDP). A su juicio, este éxito de la investigación sirve una vez más como advertencia: “Nuestro Estado constitucional y el orden fundamental de la democracia libre están amenazados por muchos lados”. En la misma línea, la ministra del Interior, Nancy Faeser (SPD), ha felicitado a las fuerzas de seguridad por haber frustrado en una fase temprana los planes golpistas y ha alertado de la “peligrosidad de extos extremistas de derechas que estaban siendo entrenados para manejar armas y habían adquirido equipo militar”.