Los líderes del grupo parlamentario conservador, Friedrich Merz y Alexander Dobrindt, exigen al canciller Olaf Scholz que solicite el voto de confianza al Bundestag inmediatamente y no hasta mediados de enero como tiene planeado. Tras la ruptura de la coalición por la salida de los liberales, Merz, presidente de la Unión Cristiano Demócrata (CDU) pide una cita “a más tardar a principios de la próxima semana”. “Entonces, el Parlamento tendría tiempo suficiente para tomar las decisiones necesarias antes de una posible disolución por parte del presidente federal, Frank-Walter Steinmeier, apunta Merz. El presidente de la CDU, que ya ha sido designado como candidato a canciller por su partido, ha hablado incluso de la segunda quincena de enero como nueva fecha electoral. El líder de sus socios bávaros, la Unión Social Cristinana (CSU), considera que una coalición formada por socialdemócratas (SPD) y Los Verdes (Die Grünen) no tiene derecho a seguir gobernando. Proseguir con la actividad gubernamental sería «arrogante e irrespetuoso» hacia los votantes, afirma Dobrindt. El tripartito alemán que se presentó en 2021 como un Gobierno de progreso, ya es historia. El pacto, inédito en la historia alemana entre socialdemócratas (SPD), verdes (Die Grünen) y liberales (FDP), saltó anoche por los aires en una reunión convocada para salvarlo in extremis. Los liberales han decidido abandonar el Gobierno alemán por diferencias irreconciliables en materia económica, aferrados al freno a la deuda, y negándose a firmar el presupuesto que previamente habían aceptado. Con ello, han puesto a la primera economía europea en modo electoral. El canciller decidió anoche cesar al ministro de Finanzas y líder de los liberales, Christian Lindner, a quien ha acusado de repetida deslealtad y de irresponsabilidad por dejar el Gobierno “en un momento de gran inestabilidad” tras la victoria de Donald Trump. Otros tres ministros liberales abandonan. Permanece en su cargo el de Transporte e Infraestructura Digital, Volker Wissing , quien ha dimitido del FDP. “No me alejo de los valores básicos de mi partido y no quiero afiliarme a otro. Se trata de una decisión personal que responde a su idea de responsabilidad: “Quiero seguir siendo fiel a mí mismo”. El canciller alemán gobernará en minoría con Los Verdes y someterá a votación del Parlamento hasta Navidad, todas las leyes que, a su juicio, no puedan retrasarse como las de desgravación fiscal, el paquete de pensiones y la aplicación de la reforma europea de asilo.Después solicitará una moción de confianza para el 15 de enero. Si la pierde, podrían celebrarse elecciones en Alemania a finales de marzo.