Mario Casas da una lección cuando habla de sus padres: "Se fueron sin nada a buscarse la vida"

Madrid

Han pasado más de 15 años desde que comenzó la serie Los hombres de Paco, en la que se dio a conocer uno de los actores más reconocidos de nuestro país en la actualidad: Mario Casas. Su trayectoria ha sido realmente asombrosa, desde aquella irrupción en una de las series más populares de la televisión española hasta su más reciente participación en la película Escape. En el camino, ha recibido un sinfín de reconocimientos, entre ellos uno de los más importantes en el ámbito cinematográfico: un Premio Goya por su papel protagonista en No matarás. Sin embargo, esta vida de reconocimiento y fama no siempre fue así para el actor, nacido en A Coruña y, como él mismo cuenta, criado por "unos padres muy jóvenes" que tuvieron que "buscarse la vida".

Mario Casas acudió a los micrófonos de la Cadena SER y participó en el programa Transmite la SER con Juan Carlos Ortega. En esta entrevista, entre muchas otras cosas, Casas destacó el papel tan importante que tiene la familia en su vida. Su relación familiar está marcada por la poca diferencia de edad que tiene con sus padres. "Mi madre me tuvo con 16 o 17 años", aseguraba Casas, y añadía que lo une a sus padres un vínculo de "amistad". Además, el actor habla de la "admiración" que siente por ellos y por sus orígenes: "Vienen del barro; eran una pareja que vivía en Coruña, y se fueron a buscarse la vida a Barcelona sin nada", explicaba Casas.

Por todo ello, Mario Casas tiene muy en cuenta a su familia en cada cosa que le ocurre o cualquier decisión que debe tomar, un apoyo incondicional para el actor y que, como cuenta, siempre ha sido así. "Mi familia es de las que siempre ha estado ahí", dice, describiendo la relación como de "consejo". Casas se apoya sobre todo en su madre, con la que "comparte cada cosa", aunque destaca al núcleo familiar al completo, que para él es "lo más importante".

Especialmente valora la sinceridad que siempre le ofrecen: "Toda esa gente que me rodea desde siempre, que me ha visto en las buenas y en las malas, y que son, y esto es importante, quienes me dicen las cosas negativas". Las personas del círculo más cercano a Mario Casas son honestas también con su trabajo como actor: "Te dicen la verdad: 'Oye, se nota que has trabajado, pero bueno, a mí la película no me gusta'. Son quienes me dicen constantemente las verdades, y para mí eso es necesario". Porque, para Mario Casas, "lo más valioso es la familia".